El iPad. ¿Quién no conoce uno de los gadget estrella de Apple? Ha sido uno de los productos que ha experimentado un mayor crecimiento en la historia reciente de la electrónica. Y todo esto tiene más valor aún, pues además era la punta de lanza de una nueva tipología de productos y a la vez iba abriendo un mercado nuevo, el de las tablet.
A la pregunta de como usamos cada uno nuestro iPad, podemos encontrar multitud de respuestas diferentes y muy variopintas. Pero seguro que a casi ninguno de nosotros se nos ha ocurrido usarlo en la cocina. Sí, ya se que algunos diréis que, como en mi caso, lo habéis llevado a la cocina para poder oír la música en Spotify o ver una película mientras cocinamos. Además tenemos accesorios que nos permiten ubicarlo de una forma más o menos adecuada, incluso como un imán en la nevera.
Pero ¿y si queremos dar un paso más? No estaría mal que por un precio pequeño, en comparación con lo que cuesta una cocina, podamos modernizarla de una curiosa forma. Y es que una gran parte de nuestra vida la pasamos en la cocina (unos más que otros). Tener un recetario a mano sin necesidad de manchar libros o tener que estar buscándolos en las cajoneras o algo tan cotidiano como dejar notas en imanes en el frigorífico pueden tener los días contados. Todo esto se puede hacer con el iPad. Incluso tener un albúm fotográfico de nuestros platos para los más sibaritas o ir de compras sin salir de casa al comprobar el estado de la nevera.
En mi caso y para la realización del artículo, he de decir que he probado algunas aplicaciones y me han sorprendido. En primer lugar por la ingente cantidad que tenemos en la App Store, muchas de ellas gratuitas y como una pequeña muestra la imagen inferior. Y por otro lado, también es de destacar lo bien realizadas que están hechas muchas de ellas. He probado desde un curioso temporizador para avisarnos de cuando están listos nuestros platos o un curioso recetario de cocina mediterranea tradicional (de la abuela, vamos). Pero la aplicación que más me ha sorprendido ha sido una que habilita un recetario en el que incluso realizar la lista de la compra. Esta además tiene videos de como realizar la preparación del plato que deseemos.
Múltiples aplicaciones aparecen en la App Store relacionadas con la cocina, que además tienen un toque muy social. Así muchas de nuestras actividades culinarias podemos compartirlas en el momento con quien queramos. Otra opción es junto con un iPhone, usar el iPad como monitor para vigilar a un bebe o una mascota mientras estamos en la cocina. Es solo el comienzo y no me refiero con ello solo al iPad; hablo de como la tecnología entra en nuestras vidas de la forma más insospechada.
Me parece un tema interesante, pero no sé hasta que punto el iPad puede sufrir en un ambiente hostil como la cocina…
@Miguel Regueira, Hombre Miguel… yo tampoco lo veo, pero para peligros los de las comidas que prepara alguna gente
Para quien le gusta cocinar(me incluyo) las apps de cocina junto a una pantalla grande del ipad para ir ojeandolas pueden y deven tener muchisimo exito