Para ninguno de nosotros es nuevo el hecho de que los productos de Apple tienen un precio bastante por encima de lo que todos tenemos concebido que cuesta un “capricho” tecnológicamente hablando. Cualquier persona que no haya tenido apenas contacto con la marca de la manzana mordida, pensará que pagar las millonadas que hay que pagar por un portátil son excesivas. Para los que ya vamos conociendo el mundillo, podemos reconocer que los precios son bastante altos, pero ello está justificado de una manera que los demás no entienden y es que estás pagando por tecnología punta que es capaz de garantizarte un rendimiento más que aceptable a lo largo del tiempo. Es decir, que si cuidas un MacBook de manera adecuada puedes permitirte el lujo de tener el mismo ordenador durante cinco, ocho o diez años funcionando exactamente con el mismo rendimiento, algo que nadie podría decir de otras marcas.
Cómo llegó Apple donde está
Cuando Apple fue creada, la empresa se volcó en el mercado de los ordenadores, en un principio pensados como tecnología hecha para llevar a las empresas, pero con un enfoque distinto, con la posibilidad de llevar un ordenador a cada casa, un concepto hasta entonces impensable. Compitiendo directamente con IBM lanzaron el Apple Lisa por un precio que ahora podríamos pensar arrebatador para los tiempos que corrían, 10.000$. ¿Pero quién iba a permitirse pagar esa cantidad de dinero por algo que aún no tenía una utilidad definida en el mercado? Era la primera vez que se veía una interfaz gráfica en un ordenador y, por entonces, aún no se veía el futuro de los ordenadores en los hogares.
Durante los últimos veinte años, las cosas han cambiado drásticamente. IBM dio paso a Microsoft y Apple quedó en segundo plano, con ventas constantes, bajas pero contantes, pero teniendo en cuenta que era más la exclusividad lo que tiraba de ella en los países fuera de Estados Unidos que las capacidades que el sistema tenía, estando destinados únicamente a aquellas profesiones relacionadas con el diseño, la imagen y el sonido, en las que un Mac se desenvolvía con mayor soltura. Apple lanzó Macintosh, y tras él, la gama iMac, MacBook y lo que encontramos en la actualidad, la gama MacBook Pro, Air, superando todos sus récords de ventas y generando más beneficios que en todos sus años de existencia juntos.
A día de hoy, Apple es un referente en el mercado. Desde el lanzamiento de la gama móvil (iPhone y iPad), los ceros no hacen más que crecer en sus cuentas bancarias y sus ordenadores comienzan a proliferar en países en los que antes eran extraños. Ya no es raro ver un portátil con una manzana en el reverso, realmente es tan común como ver cualquier otro fabricante de ordenadores. ¿Y todo esto, por qué? ¿A qué viene un crecimiento de ventas tan desmesurado con un hardware de precio tan alto?
¿Qué hace tan especial un Mac?
Apple ha dicho en numerosas ocasiones que ellos “fabrican ordenadores“. Si observamos la competencia directa, Microsoft, ellos crean únicamente el sistema operativo que luego otros fabricantes integran en sus ordenadores. Por supuesto, el precio de esto es menor, ya que el hardware que estamos adquiriendo de este modo, aunque haya sido firmado por el fabricante, no está hecho a medida como sí ocurre con los Macs. Todos los ordenadores que Apple ha sacado a la venta se han diseñado tanto por dentro (el software) como por fuera (el hardware) por ellos mismos. Por ello, pueden garantizarnos una experiencia de usuario con una apariencia y un funcionamiento perfectos. Ello permite que un ordenador con varios años de antigüedad funcione “como un guante” tras mucho tiempo de uso. Todo esto ocurre tanto en la gama portátil como en la gama móvil, aunque es cierto que la gama móvil se sustituye con mayor rapidez y es que es cierto que para Apple también existe la misma obsolescencia que existe en todas las marcas. Pero de un modo en el que los gastos más grandes (de ordenadores, de sobremesa o portátiles) son a largo plazo y los más pequeños (iPhone o iPad) a corto plazo, ya que su renovación es más necesaria año tras año.
Cuando compras un Mac no estás comprando un ordenador, estás comprando un ordenador con un sistema operativo creado de cero para él, con el hardware más potente en el momento en el que lo adquieres y además, presentado de una manera soberbia en su embalaje. Cuando lo enciendes, simplemente funciona.
Hace dos años que me pasé al mundo de la manzana mordida, tras muchos problemas con mi antiguo PC, y al menos una cosa tengo por segura: haya pagado lo que haya pagado, mi MacBook Pro funciona exactamente igual que el primer día sin ninguna traba, y eso, no tiene ningún precio.
Exelente articulo!
Muchísimas gracias! Me alegra ver que compartes la misma opinión que yo 😉
Genial análisis y sin ser pro-Apple he de decir que no te falta razón, cuando una persona compra Apple está pagando por un desarrollo aunado de software y una arquitectura hardware a medida, cosa que a nivel empresarial unicamente es capaz de igualar IBM con sus equipos Aix.
Muchas gracias. La verdad, no hay que ser pro-Apple para reconocer lo que os escribo, es una cosa que se puede observar claramente en el momento que enciendes un Mac por primera vez. Entonces, lo entiendes todo 😉
Yo hace escasamente 20 días que llegó mi primer Mac a casa… un iMac concretamente… He de decir que tenía altas espectativas puestas en el, y todo tras haber probado uno hacía 2 o 3 años (nada que ver a lo actual).
Espero que tu nuevo iMac cumpliera tus altas expectativas, la verdad es que los iMacs que se están vendiendo ahora son una delicia 😉
Y en cuanto a la linea de iPods?, no veo la justificacion de el precio tan exagerado, sobretodo en el iPod Nano que solo reproduce musica, con pantalla touch, pero a que precio, para mi me parece un poco exagerado.
[…] cuota de mercado y relevancia, tienen difícil hacerse con un lugar preeminente a causa de su elevado coste y reducida […]