Cada vez queda menos para que aparezca el nuevo iPhone 5. Constantemente salen rumores nuevos, y en Applesencia intentamos publicar aquellos que tienen más fuerza o parecen más convincentes. Más o menos sabemos que el teléfono saldrá al mercado entre septiembre u octubre, y puede que el modelo que acabe saliendo sea distinto a sus anteriores hermanos.

Muchos de nosotros somos actualmente usuarios de un iPhone, ya sea el 3GS o 4, y seguramente un porcentaje importante de estos estará pensando en dar el salto a la nueva generación del teléfono de la manzana. Enfriando la cabeza y pensando con el bolsillo, deberemos hacer balance de las novedades y la utilidad que le podamos sacar al futuro terminal. Llegados a este punto, hay una pregunta obligada que nos debemos hacer todos sus usuarios.

¿Qué debe tener el nuevo iPhone 5 para que acceda a comprármelo?

Personalmente, espero un diseño completamente nuevo y que no se parezca en nada al 3GS. Sé que hay muchos adeptos de ese modelo, pero el 4 me tiene enamorado. Como mucho, que siguiera las bases del iPhone 4, siendo más delgado y con la parte trasera en forma de semi-curva, como ya se ha rumoreado.

Otra característica que debería llevar es la pantalla más grande. También se está hablando de que esta posibilidad acabará siendo real, y para mí es una característica imprescindible para el gadget que se avecina. Además de ganar más espacio para ver las aplicaciones o navegar por internet, la tarea de escribir sería más amena y sencilla.

La eliminación total del botón home. Se dice que lo que ocurrirá es todo lo contrario, y que el iPhone 5 traerá un botón home más alargado y posicionado más abajo de lo normal. El iPhone es un teléfono táctil, y con esta filosofía se catapultó al éxito. Ahora mismo, el botón sobra. Podría existir formando parte de la pantalla, pero siendo capacitivo en lugar de físico. Si no es en el próximo terminal, acabará sucediendo en futuros lanzamientos. Es algo de lo que llevo tiempo bastante convencido.

Tecnología NFC: Si el iPhone la trae de serie, la inclusión de dicha tecnología en smartphones será más rápida, por lo que los comercios la implementarán a corto plazo. Recordemos que se trata de un método capaz de transferir datos inalámbricamente a una distancia máxima de 20 cm y a una velocidad de 424 kbit/s, cuya utilidad serviría para pagar nuestras compras o identificarnos desde el iPhone.

Me gustaría que trajera una cámara capaz de realizar capturas en 3D. Sé que esto es lo menos probable de todo, y tal vez poco útil. Pero esta tecnología va cogiendo fuerza, y tarde o temprano Apple la acabará implementando en sus dispositivos. Tampoco necesito una cámara mejor. Si la incrementaran a 8 MPx (que sería el paso lógico), sería un valor añadido, pero no imprescindible para mí.

Si queréis apostar, hacedlo por el Chip A5 de Apple. Esta actualización está cantada, y ya incorporada en el iPad 2. Un poquito más de RAM no iría del todo mal y haría del terminal uno de los más potentes del mercado. Seguramente, con el próximo iOS 5 será necesario.

Algo que todo el mundo agradecería es una mayor duración de la batería. El “problema” no es sólo del iPhone, ya que es generalizado entre todos los smartphones del mercado. Reduciendo tamaño, se hace difícil pensar en un logro semejante, pero si la batería durara dos días enteros con un uso intermedio, sería un éxito. Actualmente, si le das poco uso al terminal, la batería puede sobrepasar el día de vida, pero poco más. Dándole un uso intensivo, te puedes quedar corto y no terminar la jornada, hecho que obliga a más de uno a llevar el cargador encima.

Y para un servidor, usuario de iPhone 4, sería suficiente con todo esto para dar el salto sin pensármelo. Si lo único que saca Apple es un sustituto del actual con un nuevo diseño, mayor pantalla y una batería mejor, casi seguro que acabaría accediendo al jugoso juguetito nuevo de la manzana.

¿Qué necesitáis vosotros para comprar el cercano iPhone 5?