Desde el mes pasado, Mac OS X Lion empiezó a ocupar un lugar en nuestras vidas y Mac. Su llegada a significado una evolución, y en parte una revolución. Cosas que Apple ha aprendido con iOS las ha aplicado en OS X sin ningún complejo, y el resultado obtenido cada vez es más gratificante y reconocido por nosotros, los usuarios. Seguramente, en un futuro no muy lejano, la presencia de iOS en OS X será cada vez más importante, aportando su estilo característico a la interfaz para Mac. ¿Pero hasta qué punto puede ser bueno este posible paso?
El OS X de Mac siempre se ha caracterizado por su modernidad, clase, interfaz y por estar un paso por delante de la competencia. A lo largo de casi treinta años, ha ido evolucionando hasta llegar a un punto en el que el margen de mejora ha quedado reducido. El remedio que Apple le ha aplicado es sencillo, pero tiene todo el sentido del mundo. Los smartphones y los tablets están suponiendo un cambio entre la sociedad. Casi todo lo que hacemos con un sobremesa o portátil, lo hacemos desde un iPhone o iPad. Cada vez más gente utiliza estos gadgets, que se han intercalado entre nosotros casi sin percatarnos. Estamos más que habituados a usar iOS, o como mínimo familiarizados. Su excesiva e insultante facilidad de uso convierte la adaptación en un mero trámite. Conscientes de ello, Apple decidió “iOSificar” las características de OS X, y como resultado de esta mezcla se ha obtenido el primer sistema operativo para ordenadores que adapta muchos conceptos de los sistemas para móviles. Su nombre lo conoce todo el mundo: Mac OS X Lion.
Donde más notamos la integración de iOS en Lion es en el trackpad y la función Launchpad. Gracias al trackpad podemos desplazarnos por la interfaz de nuestro ordenador como si de una pantalla táctil estuviéramos hablando. Efecto iOS, movimientos multi-táctiles y desplazamientos sencillos e intuitivos. En Launchpad ordenamos todas las aplicaciones al más puro estilo iPhone, iPad o iPod Touch, en el que abrir aplicaciones es fácil, al igual que crear carpetas.
¿En qué puede mejorar iOS al actual OS X en un futuro?
– Notificaciones: En OS X, actualmente recibimos avisos sonoros en algunas aplicaciones o vemos la típica redonda roja con un número situado en una esquina de la app, avisándonos de que tenemos cosas pendientes que revisar. No estaría nada mal crear ventanitas emergentes, o por qué no un…
– Centro de notificaciones: Pensar en él nos transporta al nuevo iOS 5. Integrarlo en Mac sería dar un gran paso, y ayudaría estar informado de las notificaciones que pudieran proporcionar todas las aplicaciones, tales como mail o redes sociales. Podría estar situado en la parte superior de la pantalla, y aparecer al hacer un gesto multi-táctil o deslizar de arriba abajo la supuesta ventana.
– Un Launchpad para todo: El concepto actual aplicado a la máxima expresión. En estos momentos, Launchpad sólo es útil con las aplicaciones. ¿Por qué no integrarlo para todo? Con ello se lograría una interfaz más pura, sin objetos por medio que la llenen o saturen. En el Dock sólo habría espacio para las aplicaciones que más nos interesaran, para tener un acceso más directo, pero desde el Launchpad podríamos acceder a toda configuración del sistema, carpetas con archivos, películas, AirDrop, etcétera. Claro está que se tendría que pensar de tal manera que Finder se integrara en él, permitiendo ejecutar cualquier búsqueda desde Launchpad.
– Trackpad de serie: Todos los Mac de sobremesa deberían incorporar un trackpad desde su compra. Ya sea físicamente tal y como es ahora o añadiendo un panel a un lado del teclado o en su parte inferior, al estilo portátil. Esto facilitaría la adaptación por parte de los usuarios a la hora de navegar por el nuevo sistema operativo. A parte, claro está, quien quisiera tener un ratón tendría la opción de hacerse con él.
¿Os gustaría la idea? ¿Apostarías por una “iOSificación” de Mac OS X? ¿Qué os faltaría integrar?
