Volkswagen presenta el iBeetle, el escarabajo que soñó con ser el iCar

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Volkswagen vuelve a traer la idea de los iCoches después de la exitosa edición especial del iGolf. Ahora lo intentan con el escarabajo, y el nuevo iBeetle, aunque pudiéramos pensar que es un coche fabricado en colaboración con Apple, no es más que un Beetle con un soporte integrado para nuestro iPhone, y que a través de una aplicación nos dará algunos datos extra sobre nuestro coche.

Vista exterior del iBeetle

Si hay algo que nos gustaría ver materializado algún día es un coche fabricado por Apple, o al menos en colaboración con alguna compañía. Hasta hoy sólo hemos visto colaboraciones puntuales de ediciones especiales, sobre todo en el momento estrella de los iPod, donde los coches con conexión especial para iPod en forma de edición especial aparecían por todos lados.

Uno de los ejemplos más representativos en nuestro país son el Renault Clio iPod y el iGolf. Incluso hace poco vimos como Apple estaba trabajando codo con codo con Ferrari para integrar los iPad en algunos de los modelos del cavallino rampante.

Y esta semana Volkswagen nos anuncia que vuelven a sacar una nueva de las decenas de ediciones especiales que ya tenido el nuevo Beetle. Dejando a Herbie atrás, los alemanes presentan el iBeetle. Te pensarás que es un Beetle con un sistema de infoentretenimiento hecho junto con Apple, pero te equivocas.

ibeetle-interior

Es un Beetle al uso, que en la zona superior del salpicadero trae una base para colocar nuestro iPhone. Según la marca se trata de uno de los primeros coches del mundo en tener una interfaz integrada para el iPhone que ha sido creada junto a Apple. Pero hay que coger con pinzas de cirujano esta afirmación, porque solo se trata de una aplicación que se comunica con el coche.

Así pues, el trabajo de VW se limita a haber creado una aplicación que se comunica con el dock, y que nos permitirá escuchar música desde Spotify e iTunes. Además, cuenta con un medidor de fuerzas G, termómetros digitales para el radiador y el aceite, un cronómetro, brújula, un lector de noticias y una función para enviar “postales” a tus contactos con tu posición y fotos tomadas desde el coche.

Lo peor es que como la base se ciñe firmemente al iPhone, cada vez que cambiemos de iPhone tendremos que ir al concesionario a comprar una nueva carcasa y pasar por caja.

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