Era de esperar que el rediseño experimentado por iOS en su séptima versión llegase también a Siri, y así ha sido. Eddy Cue fue el encargado de anunciar las novedades introducidas en el asistente personal; dichas novedades, lejos de limitarse a una remozada y minimalista interfaz, han ido más allá, tratando de dar una vuelta de tuerca a su interacción con el usuario.
Siri tiene ahora nuevas voces. Éstas, son mucho más reales, por lo que, sin duda, se conseguirá humanizar un poco más al asistente; asimismo, los usuarios tendrán la posibilidad de elegir entre voces masculinas y femeninas. No obstante, inicialmente, solo estarán disponibles en inglés, francés y alemán, pero Apple ha afirmado que planea añadirlas, eventualmente, en más idiomas; de nuevo, nos tocará cruzar los dedos y esperar que el idioma de Cervantes no se demore en demasía.
Entre las nuevas características, cabría destacar la integración con otros servicios web como Wikipedia o Twitter, algo que le permitirá responder mucho más eficaz y eficientemente. Me ha parecido un tremendo acierto haber dotado a Siri de la capacidad modificar ajustes del sistema operativo como el brillo de pantalla, el Bluetooth o leer nuestros correos.
Por otro lado, se presentó un nuevo servicio llamado iOS en el Coche. Su objetivo no es otro que ofrecer una mayor funcionalidad a las consolas de algunos vehículos, gracias a la asociación con varios fabricantes; así, seremos capaces de realizar llamadas, tener un mayor control sobre Siri mientras conducimos y ver mapas.
Lo más extraño es que Apple se haya decidido a dar un salto así, cuando ni siquiera estaba estandarizado el Eyes Free de Siri que se presentó el año pasado. Ahora toca a todos los fabricantes rehacer sus sistemas de infoentretenimiento y adaptarse a Apple; la salida prevista de iOS in the Car está prevista para 2014. Pero ellos encantados con tal de vender más coches. Ahora eso sí, no esperemos ver este sistema en coches de gama baja, sino en las gamas más altas, y probablemente no salga de Estados Unidos.