Todos los dispositivos multimedia poseen cámara. Ya sea con más o menos megapíxeles, apertura o lente, pero la tienen. La capacidad de poder echar la mano al bolsillo y capturar ese recuerdo ha hecho que ahora todo quede registrado, por lo tanto, no viene de más tener a mano unos recursos útiles la hora de disparar.
Muchas veces, ya sea por la celeridad de querer disparar, por desconocimiento o miedo a probar cosas nuevas, no conseguimos la instantánea perfecta. Pensamos que bastará con añadir algún filtro para que la foto mejore, pero siempre digo lo siguiente: una foto es como una pizza. Si la base (harina, tomate, mozarella, etc.) no es de calidad, por mucho que le añadamos orégano no va a estar buena. Sin embargo, si hemos empleado una buena base (foto), lo poco de orégano (filtro) que necesitemos la hará deliciosa. Prepárate que te dejo unos consejos para que dejes a todos con la boca abierta.
A tener en cuenta para mejorar tus fotos
Tienes un smartphone, no una cámara cuasi profesional. Parte de ahí y sé consciente de sus limitaciones.
No abuses del zoom. Es preferible acercarse al objeto a fotografiar antes de abusar del él. La razón es sencilla, el zoom va poco a poco pixelando la instantánea y haciendo que pierda calidad.
Descubre las maravillas de la luz natural. Es sin lugar a dudas quien te va a ayudar más a que sean bellas.
Cuidado con el uso del flash. Muchas veces es preferible utilizarlo en condiciones de luz natural como un apoyo antes que en la oscuridad. Hoy en día las cámaras están dotadas de flashes muy potentes y dependiendo de cómo hagamos la foto, puede no ser de gran ayuda.
Haz uso del temporizador. Tienes opciones de 3, 5 y 10 segundos, más que suficientes para poder colocarte e ir ensayando poses.
Juega con el bloqueo de exposición y enfoque. Con esto se evita que la fotografía cambie continuamente de luz y enfoque mientras mueves y encuadras la imagen. No siempre el iPhone te va a orientar adecuadamente sobre las condiciones de luz correctas.
Utiliza los auriculares como disparador. Si los conectas, los botones de Volumen harán la foto. Utilísimo para salir en los selfies sin los brazos estirados. Los morritos son opcionales.
Coloca tus gafas de sol delante del objetivo antes de disparar si hay mucha luz ambiental. Si son polarizadas, el efecto es muy bueno.
Ayúdate de buenas aplicaciones. Si bien la nativa está bien y cumple, te invito a descubrir ProCam 4. En ella puedes encontrar herramientas avanzadas, variar la ISO o el tiempo de exposición y guardar las instantáneas en modo RAW.
Usa el modo ráfaga. Si tienes memoria suficiente prueba a dejar el dedo en el disparador. A lo mejor de 15 fotos que hagas, 3 son buenas pero, ¿por qué te las vas a perder?
Modo HDR, sin miedo. Si lo tienes activado, tu iPhone sacará varias fotos en distintas condiciones de luz para crear la “foto perfecta”. Útil en condiciones de luz escasa.
Busca un pequeño trípode. Aporta estabilidad y encuadres adecuados, teniendo además la ventaja de encontrarlos por muy poco dinero.
Recuerda que tu imaginación es quien pone los límites y las ideas más disparatadas o locas son las que dan mejores resultados. Ahora que tenemos encima el verano saca tu lado más loco y sorprende a todos con tus fotos más increíbles.