El lanzamiento del esperado terminal para celebrar el décimo aniversario del iPhone y la presentación del iPhone X solo ha sido una coincidencia. De acuerdo con declaraciones del jefe de producto y diseño de la compañía de Cupertino, Jony Ive, el esperado flagship de Apple tardó cinco años en diseñarse.
Asimismo, Ive ha compartido en el medio japonés Brutus Casa, que el iPhone X, próximo a enviarse este 3 de noviembre, representa un gran cambio en el diseño de los smartphones de la compañía, ya que lo que se busca es que cada dispositivo se vea como una sola pieza y no como un cumulo de partes diferentes.
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El iPhone X lo cambiará todo
Sobre el nuevo móvil, sin Touch ID, pero con una característica que ya ha dado mucho de qué hablar, Ive asume que se trata del fin de una larga etapa de diseño, pero también, representa una nueva era en el desarrollo de Apple. Así, el diseñador reconoció la importancia de Face ID, señalando que:
Tener un dispositivo que nos reconoce es más importante de lo que parece. Y una meta clave del diseño es centrarse en la función y tener la forma casi invisible al usuario; haciendo que la sustitución de Touch ID con Face ID es un paso hacia el objetivo de eliminar la interacción consciente con un dispositivo.
En sus declaraciones, Ive también fue interrogado sobre la presión por tener listo un equipo totalmente diferente en la víspera de la celebración del décimo aniversario del iPhone, pero para sospresa de todos, el diseñador respondió asegurando que se trató de una “maravillosa coincidencia”.
En cualquier caso, lo que se conoce hasta ahora del iPhone X nos da para asegurar que sí, se trató de un móvil en el que se la tuvieron que pensar para materializarlo, pero sobre la coincidencia, sabemos que Apple no deja nada al azar…
Sí este es el comienzo, ¿cómo imaginas la siguiente generación del iPhone?
