La semana pasada, en un sorpresivo anuncio, el Economic Daily News de Taiwan reveló información en la que Apple redujo el pedido de iPhone X en un 40%. Los que, según ese medio, significa que las estimaciones de ventas para el modelo tope de Cupertino bajaron de 40 a 50 millones de unidades.
Dicho anuncio trajo consigo una incertidumbre que se reflejó en los precios de las acciones de Apple en el mercado de valores.
Lo cierto es que, Apple no ha revelado oficialmente — y rara vez lo hace — las expectativas de ventas de sus dispositivos. Por lo que este reporte es, cuando menos, impreciso. Además, este reporte se basa en informaciones obtenidas de la propia cadena de suministro, fuentes muy imprecisas para conocer los indicadores reales de las ventas del iPhone.
Por qué no tiene sentido
Para Adam Levine-Weinberg, de The Motley Fool, es muy improbable que Apple pretenda vender 50 millones de iPhone X en el siguiente trimestre. Tomando el cuenta el precio inicial de 1000 dólares, significarán 50 billones de ingresos. Eso, más el resto de los dispositivos de la marca, se traducirían en unos 100 mil millones de dólares en ingresos durante el trimestre, es decir, 53 mil millones más que el año anterior.
Adicionalmente, los reportes más optimistas en Wall Street esperan que Apple reporte para el siguiente trimestre unos 83 mil millones de dólares en ventas, aunque el promedio estima que serán más bien unos 69 mil millones. Por tanto, no tiene sentido que las expectativas de Apple sean tan superiores a las del mercado.
Aunque estas informaciones son, con seguridad, una exageración para golpear a los de Cupertino, lo cierto es que el nadie conocerá las ventas reales del iPhone hasta el siguiente reporte trimestral de Apple. Mientras tanto, diferentes reportes han indicado que el iPhone X representa un 30% de las ventas totales de móviles nuevos de Apple, solo en Estados Unidos. Mientras que en China, ese porcentaje asciende hasta un 50%.
