Probamos el i-Helicopter

Como algunos sabréis actualmente estoy haciendo unas prácticas en DealExtreme, llegué aquí hace casi un mes y medio y de las primeras cosas que probé fue un helicóptero. La experiencia me encantó tanto que casi sin querer he probado la gran mayoría de los helicópteros que hay por DX.

Uno de los más curiosos, por el control remoto que emplea sea tal vez el i-Helicopter, que, como podréis adivinar por la i inicial, algo tiene que ver con Apple. Actualmente creo que DX es la tienda on-line que más barato lo vende, está (el que creo que es el mejor, he probado los otros y no creo que vuelen tan bien) a $42, que son unos 31,87€ (aproximadamente).

Como podéis apreciar en la fotografía superior, dentro de la caja nos vienen dos cosas (a parte del cable de carga y algunas piezas de repuesto por si tu supuesta pericia a los controles del aparato no fuese tal): el helicóptero y el control remoto.

El control remoto es bastante simple: una pieza rectangular de plástico negro casi en su totalidad (casi igual de ancho que el iPhone), con un agujero para cargarlo, una conexión mini-jack de 3,5mm (la típica de los auriculares, vamos), un led azul con el que podremos saber si está encendido o no, y un lateral cubierto por plástico transparente de color azul a través del cuál podemos apreciar los tres emisores de infra-rojos que nos ayudarán a governar el aparato una vez estemos volando (dependiendo de la frecuencia a la que lo usemos -tenemos 3, la A, la B y la C- usaremos uno u otro).

El helicóptero, como la mayoría de los que se venden en DealExtreme, tiene la estructura del chasis fabricada en algún tipo de aleación metálica bastante resistente y la cabina de plástico, así como las palas y los patines, que son los que suelen llevarse los porrazos cuando algo no va como debería y te estampas contra (la pared/techo -esto es opcional- y) el suelo. En la parte inferior del helicóptero, a parte del receptor de infra-rojos, observaremos una luz que podremos encender o apagar con el control remoto.

En el lateral izquierdo encontraremos un agujero para su carga, en el derecho el interruptor de encendido/apagado. No es grande pero tampoco pequeño, debe medir alrededor de 16-20 centímetros (no lo tengo ahora delante). Cómo no, tiene doble hélice y giroscopio, que le otorgan una mayor estabilidad.

Los tiempo de carga son uno de los talones de Aquiles del juguetito, básicamente porque para 40 minutos de control remoto hay que cargarlo más de una hora, un poco menos para el helicóptero, que durará un poco más de 10 minutos en el aire (solo hay un cable de corriente). El consumo durante los 10 minutos en el iPhone 4 a penas se notan (no he tenido la oportunidad de probarlo con otros iAparatos).

El uso es sencillo, te descargas la aplicación i-Helicopter en el iPhone/iPad/iPod touch (me parece que os estoy dando el link a la store americana, pero también lo podéis encontrar en la española), cargas el iPhone, el control remoto primero y después el helicóptero y más de dos horas después conectas el control remoto, pones el volumen del iPhone al máximo, enciendes el helicóptero, entras en la app, seleccionas el i-Helicopter que te has comprado (hacedme caso, el del link que os he pasado es el que vuela mejor), le das a ON para encender el control remoto y a volar.

La app no tiene muchas opciones, como podéis apreciar en la foto es bien sencilla, a la izquierda tienes la aceleración, a la derecha los controles de dirección (recordemos que el helicóptero solo puede ir hacia arriba/abajo, adelante/atras y rotar sobre si mismo a la derecha/izquierda), en el centro -arriba- tenemos tres botones, que son los tres canales en los que funciona el helicóptero, con el botón de la esquina superior izquierda podremos volver atrás en la app y elegir otro helicóptero de la lista si nos hemos equivocado, y con el botón de la esquina superior derecha podremos usar el giroscopio integrado del iPhone para controlar la dirección (que no la potencia), hecho que suple muy bien los problemas derivados de no tener controles físicos (si quieres controlar decentemente un helicóptero no puedes estar mirando cada dos por tres a los controles). En el centro, tres botones más, de arriba abajo: encender o apagar la luz; cambiar la orientación de la pantalla (por si nos molesta la parte del remoto a la hora de controlar bien el helicóptero); y encender o apagar el control remoto -la cosa que conectamos a la salida de auriculares, me refiero-.

En cuanto a usabilidad, la verdad es que no es de los mejores que he tenido, pero sí que es de los más divertidos, puesto que el no saber si estás apretando a los botones correctos le da un plus de dificultad (con el giroscopio del iPhone también cuesta pillarle el truquillo). No tiene más, el resto funciona perfecto.

Comentar que es un helicóptero exclusivamente para interiores por dos motivos: – Usa infra-rojos, así que el sol no te dejará controlarlo. – Cualquier brisa lo desestabilizará.

Como conclusión: no es el mejor helicóptero que tiene DX pero el producto es lo suficientemente novedoso y curioso como para que crea que merece la pena desembolsar 32€ (que lo creo, por si no ha quedado claro). Tiene como contras el tiempo de carga y el no tener controles físicos, pero a mi me ha dejado buen sabor de boca.