Como comentábamos hace unos días, hay indicios de la salida en no demasiadas jornadas de la versión de iOS 5.1. No debemos olvidar que junto a esto se rumorea también con la posibilidad de presentación el tres de marzo del iPad 3 y todos sabemos que en la keynote de un nuevo producto, a los chicos de Apple les gusta también mostrar una nueva versión de su sistema.
Y es que en el código de la última beta de iOS 5.1, se ha observado una nueva nomenclatura, que responde al nombre en clave “J33″ que puede corresponderse con un nuevo dispositivo. ¿Con cual?. El televisor de Apple no parece que sea.
Para intentar arrojar algo de luz hemos de hacer un poco de memoria y recordar como en la primera beta de ese mismo firmware ya aparecía el código “J2”, que hacía presuponer a la comunidad que escudriña cada lanzamiento de la manzana, que se refería al nuevo iPad que sería presentado en breve y que ya estaría en producción.
Otra motivo para pensar que algo así puede tener fundamento es la escasez de existencias en el almacenaje del producto. Sabemos que Apple cuando está próxima al lanzamiento o bien a la modificación del alguno de los gadgets que ya tiene en catálogo, hace que se produzca una caída en el stock, debido entre otras cosas a la bajada o cese de producción del mismo para comenzar en breve a vender el nuevo. En este caso eso mismo ocurre con el Apple TV, del que ya algunas grandes cadenas de distribución en los Estados Unidos como es Best Buy o Amazon han colgado el cartel de “fuera de stock” o “producto del 2010”.
Por ahora no se sabe nada más al respecto, tan solo los rumores provenientes de tierras norteamericanas, pero no deben tardar de dar el salto a otros países del viejo continente, junto con problemas como las dificultades para servir el producto ante la falta de existencias, lo que sí que nos podría ya servir de motivo para unas sospechas más fundadas.
Esperamos pues acontecimientos, ya que se prevé un final de febrero y comienzo de marzo movido en las oficinas de Cupertino, volviendo así en parte a recuperar un poco el ritmo de los lanzamientos que parecía se había desfasado.