Empiezan los problemas o al menos, surgen los primeros inconvenientes para Apple. Tras la keynote una de las novedades más destacadas era el paso del conector de 30 pines a otro nuevo de 8 pines llamado Lightning. Además, Apple fiel a su filosofía de sacar provecho de cualquier adaptador, va a poner a la venta un adaptador para que podamos seguir usando los accesorios actuales a un precio de 29 euros.
El problema se ha conocido cuando se ha descubierto que la salida de vídeo no se encuentra entre las características del nuevo conector. ¿Esto nos deja solo como opción AirPlay para transmitir vídeo? Parece que así es y vamos a ver limitadas las capacidades de conectividad de nuestro dispositivo. Por ahora ya se ha desvelado en algunas páginas que ofrecen productos compatibles, con que el conector no ofrece soporte para la transmisión de vídeo. Desde iMore hablan de ello con estas palabras:
El antiguo conector de 30 pines permitía el uso de funciones como era la entrada de línea, video por componentes y vídeo compuesto. Con el cambio a la nueva conexión Lightning en el iPhone 5, el nuevo iPod Nano y el iPod Touch nuevo, se lograron mejoras importantes como son una transmisión digital completa, un diseño completamente nuevo y un tamaño mucho más pequeño. Pero hay cosas que podrían haberse perdido, como salida de vídeo.
Hasta ahora, Apple tenía un adaptador con salida de vídeo HDMI y VGA disponibles ambos para el iPhone y iPad. Ahora, con la nueva conexión Lightning, no han dicho nada de accesorios que aprovechen este conector. Aunque puede una posibilidad remota, quizás en un futuro se lancen los adaptadores actualizados, pues si Lightning soporta transmisión de datos digital, HDMI lo es, VGA no.
De momento, lo que nos propone Apple es el uso del AirPlay con el Apple TV. Se puede transmitir vídeo a 1080p a la tercera generación del Apple TV o en calidad de 720p al modelo Apple TV de segunda generación. Desde un punto de vista del usuario que adquiere un producto como el iPhone, supone un inconveniente el depender de una red inalámbrica para poder transmitir vídeo a una pantalla externa, algo que aunque en Apple traten de disimular, no es fácil de esconder.