Hoy, en Apple Vintage, retrocedemos hasta el año 1997, fecha en la que Apple presentaba la PDA eMate 300. Basada en la Newton MessagePad, se comercializó exclusivamente para el ámbito educativo, en el que Apple influyera bastante a principios de los años 80 cuando presentó su interfaz GUI (Graphic User Interface).
La apuesta de Apple fue un precio competitivo (800 dólares) en un equipo a medio camino entre una PDA y un ordenador portátil, añadiendo como complemento aplicaciones específicamente diseñadas para profesores y alumnos, tanto para trabajar en el aula como en casa.
Principales características
El eMate 300 hacía uso del sistema operativo Newton, incorporando un teclado y un Stylus. Su pantalla retroiluminada en escala de grises con una resolución de 480×320 píxeles y un procesador ARM 710 RISC a 25 MHz lo convertían en equipo con unas características más que aceptables. Además, incorporaba 8MB de ROM y una memoria RAM de 3MB.
El dispositivo sobre todo destacaba por la capacidad de expansión que ofrecía, ya que se podía ampliar el data bus de 16 a 32 bits o añadir más memoria DRAM. Newertech era la encargada de suministrar las tarjetas de expansión, convirtiendo al eMate 300 en un dispositivo bastante competente para realizar las más variadas tareas en el ámbito educativo. Disponía de un slot PCMCIA, que además de servir para alojar diversos tipos de tarjetas de expansión, se podía utilizar para añadir módems, tarjetas ethernet, tarjetas inalámbricas y de Bluetooth, o tarjetas de memoria flash (ATA/Compact Flash).
Un diseño rompedor
En cuanto al diseño, hay que decir que suponía uno de los grandes atractivos de este híbrido entre PDA y ordenador portátil. Su carcasa translúcida y un teclado de color verde oscuro ofrecían algo diferente a los clásicos colores apagados de los dispositivos de la época, al tiempo que el plástico resistente del armazón lo convertía en un dispositivo resistente y pensado para un uso intensivo. Se podría considerar como el antecedente del primer iBook de Apple, que saldría algún tiempo después y al que dedicaremos un post próximamente.
Finalmente, el dispositivo dejó de fabricarse a principios de 1998, coincidiendo con el final del sistema operativo Newton y toda la línea de productos que giraban en torno al mismo. Como curiosidad, el eMate 300 solamente se comercializó en la combinación de colores que podéis ver el las imágenes, aunque se pensó seriamente en combinar otros tonos como púrpura, transparente, rojo o naranja, de los que llegaron a hacerse prototipos que nunca llegaron a producirse en masa.
El eMate 300 se convertía así en otro interesante producto por el que Apple apostaría y que no tuvo el éxito esperado, pero que a buen seguro serviría como experiencia para fabricar los iBooks, pudiendo así considerarse un precursor de la línea MacBook, que tanto tiempo lleva entre nosotros.
Os dejamos con una interesante galería fotográfica y un vídeo cortesía de nuestra página amiga Shrine of Apple. Que los disfrutéis.