Muchas fueron las reacciones cuando el MacBook Pro con pantalla retina de 13 pulgadas fuera presentado oficialmente el pasado 23 de octubre en el Teatro San José de California. Ese día Apple confirmaba que lo había vuelto a hacer, presentando un ordenador totalmente rediseñado en lugar de una versión en miniatura de su hermano mayor de 15 pulgadas. Además, se presentaba como una opción extremadamente ligera y portable sin sacrificar para nada la potencia y prestaciones. Para mí, lo mejor de 2012 en lo que ha producto innovador se refiere, ha sido este portátil.
Con una resolución de 2.560 x 1600 píxeles, cuatro veces más que su predecesor, se convertía en el segundo ordenador portátil con más resolución de los que existen en el mercado, copando la primera plaza el modelo Retina de 15″. El modelo de 13 pulgadas ponía a nuestra disposición 4 millones de píxeles, mas de lo que el ojo humano puede percibir, así que la calidad de imagen la tenemos asegurada.
Para mí, la principal innovación de Apple, además de fabricar un portátil de esta calidad partiendo casi de cero, ha sido la incursión de la tecnología Retina en un tamaño de pantalla que para muchos “entendidos” en la materia no necesita de tanta calidad de imagen. Apple daba un paso al frente con esta decisión, y no nos extrañe que sus próximos modelos de ordenadores lleven la tecnología Retina integrada y estandarizada, mientras que el resto de la competencia seguramente lo anuncie como la novedad entre las novedades, eso sí, con otro nombre, porque ya sabemos como se las gastan en Cupertino con las patentes.
Como es costumbre ya en Apple, el espacio se aprovechaba al máximo, hecho que permitía al Retina de 13″ ofrecer dos puertos Thunderbolt, dos puertos USB 3.0 y puerto HDMI, además de salida Mini DisplayPort nativa y ranura para tarjetas SDXC (compatible con tarjetas SDHC). Del diseño poco podemos decir que no se sepa ya, y es que condensar tanta potencia en 19 milímetros de grosor tiene su mérito, pero es que si encima es bonito y ligero (1.620 gramos) pues ya se borda.
Pero como siempre, Apple acostumbra a decepcionarnos con actuaciones discutibles y seguramente derivadas de suculentos acuerdos comerciales. De lo que os hablo es de la tarjeta gráfica, que no es digna de un portátil de esta categoría, y que seguramente habrá echado para atrás a muchos profesionales del sector de la creación. Una Intel HD Graphics 4000 en este portátil me parece una broma de mal gusto, siendo una de las pocas pegas que le encuentro a este MacBook, con el que he tenido ocasión de juguetear durante algunos ratos y he de decir que, pese a esto, es soberbio.
No se si estaréis de acuerdo conmigo, pero mi opinión es que el MacBook Pro con pantalla Retina de 13 pulgadas ha sido el lanzamiento de Apple del año en todos los aspectos, superando ampliamente al iPhone 5, el iPad mini, iPods y al resto de la gama Mac 2012. ¿Qué pensáis vosotros?
Yo pienso que la de 15