Durante la década de los 90 Apple no vivía precisamente una época dorada. Muchos de los lanzamientos de la compañía de la manzana supusieron un estrepitoso fracaso, bien por falta de previsión o bien por adelantarse demasiado a su época y no atender a las necesidades reales del mercado. De cualquier forma, los fracasos comerciales no afectaron a la constante necesidad de innovación y el afán por crear productos de calidad superior a las demás marcas.
El enfoque del que os hablo no lo perdieron con el monitor que os presentamos hoy, el Macintosh Color Display, que la compañía californiana presentara allá por diciembre de 1992. Se fabricó durante un año aproximadamente, dejando de producirse en septiembre de 1993. Pero no nos engañemos, a pesar de su corta vida ofrecía características bastante interesantes, haciendo uso de la tecnología más puntera de la época en monitores de ordenador.
Macintosh Color Display
El monitor de Apple tenía un tamaño total de 14″ en diagonal contando el marco, reduciendo el espacio de pantalla efectivo a 11″ aproximadamente. Usaba la tecnología, por aquellos años puntera, Sony Trinitron, que ofrecía una calidad de imagen muy buena, siendo la mejor opción para monitores que incorporaban CRT (Cathodic Ray Tube o Tubo de Rayos Catódicos). Además de la tecnología Trinitron y la arquitectura basada en CRT, los monitores incorporaban la tecnología Aperture Grille, que ofrecía una calidad y variedad de colores pasmosa para la época.
En cuanto a la resolución, sacaba 640×480 píxeles, que eran más que suficiente si tenemos en cuenta las tarjetas gráficas que se montaban en aquellos años, y ponían a disposición del usuario doméstico o de oficina unas prestaciones envidiables. El tipo de conector que usaba era el DA-15, siendo compatible con multitud de modelos Macintosh.
Con respecto al diseño, como veis se ha quedado bastante arcaico. Con más fondo que ancho, era el precio que había que pagar por la tecnología CRT, ya que el tubo debía de tener unas dimensiones determinadas. Llama la atención el color beige tan característico de los ordenadores de la época, así como la ligera curvatura de la pantalla. Y en esto es en lo que Apple se destacaba sobre el resto, ya que esa curvatura era bastante menor que la ofrecida por pantallas similares de la época, obteniendo así una mayor calidad de imagen.
Como ya es costumbre, os dejamos una interesante galería de fotos realizada por nuestros compañeros de Shrine of Apple, disfrutadla como se merece.
Se ha acabado el viaje atrás en el tiempo de esta semana, ya toca bajarse del DeLorean de Doc y Marty McFly.
esto es lo que seria actualmente la pantalla thunderbolt.
Algo parecido sí!!!