Posiblemente muchos de vosotros tendréis en vuestra casa un pequeño ordenador portátil de 10 pulgadas que os regalaron o que incluso llegasteis a conseguir con alguna promoción en un diario. Se trata de los netbook, los “miniportátiles” que tuvieron su época de apogeo allá por 2010 y actualmente están de capa caída.
Si los netbook actualmente no estaban ya totalmente muertos, poco les queda. Eso es lo que afirma la consultora IHS quien ya ha puesto fecha de caducidad al netbook para el 2015 tras el declive continuado de un dispositivo que ha quedado ya en el olvido.
Según datos de IHS las cifras de venta de netbooks están de capa caída después de sufrir un descenso sin control en los tres últimos años. Mientras que en 2010, su año dorado, las ventas se cifraban en 32 millones de terminales en este año 2013 se calcula que las ventas apenas llegarán a los 3,97 millones de unidades. Esto supone una caída en ventas del 72% si tomamos como referencia los 14,3 millones vendidos el anterior año.
Siguiendo esta tendencia se estima que en 2014 el número de netbook vendidos apenas superarán las 250.000 unidades llegando a desaparecer por completo en 2015, quedando para el recuerdo.
Steve Jobs ya lo adelantó
Con la aparición de las tablet la verdad es que cuesta encontrar un hueco en el mercado para un dispositivo como el netbook, a medio camino entre un ordenador portátil y una tablet y que realmente no es mejor en nada. Este nicho ha sido totalmente cubierto incluso ampliado por el iPad y dispositivos similares. Hay que recordar que el iPad se lanzó durante el año 2010 cuando los netbook alcanzaron sus mejores cifras pero desde entonces se ha producido una caída en picado.
Steve Jobs durante la presentación del iPad en 2010 ya adelantó que todos los que utilizaban ordenadores portátiles y más en concreto netbooks sucumbirían ante el nuevo dispositivo de Apple. Y así fue, la aparición de las tablet provocó un gran interés de los consumidores por estos dispositivos, una tendencia que ha ido creciendo en contraposición a la pérdida masiva de interés por los netbooks.