Los detectores de datos: Apple integra Mapas en lo más profundo del sistema

Hace ya muchas semanas que Apple nos presentó su nuevo sistema operativo, el que está destinado a llevar a Apple a lo más alto de la ola tecnológica (válgame el símil con su fondo de pantalla) y hacer que los que lo adoran lo hagan con más pasión y sus detractores empiecen a cambiar ligeramente su manera de pensar. Nosotros, desde Applesencia, os hemos ido mostrando todas las novedades que hemos encontrado, para que, aunque no uséis aún el sistema en vuestros equipos, sepáis exactamente lo que os vais a encontrar cuando lo tengáis oficialmente allá por el próximo otoño.

Algunos de estos cambios son muy profundos, tanto que vienen integrados en el sistema desde hace muchísimo tiempo, aunque ahora vuelven a tomar algo de interés. Os hablamos de los detectores de datos. ¿Que qué es esto? Para saberlo tenemos que hacer un poco de historia, pero qué es Apple sino historia pura de cómo han ido creciendo los ordenadores desde que se estableció, allá por el 1977. No, Apple no inventó los ordenadores (ya huelo a los haters) pero si ayudó mucho a que sean como son ahora.

Los detectores de datos: ¿Qué son?

Para conocer a estos integrantes de nuestros sistemas, tenemos que viajar hasta 1997, cuando apareció por primera vez Mac OS 8. Este sistema operativo realizó un cambio impresionante, comparado con su hermano anterior, el System 7, no solo porque fue el primero en introducir compatibilidad con Power PC, sino por muchos cambios en el sistema interno. Uno de estos cambios consistía en un sistema que detectaba los bits de datos dentro de los documentos para que el usuario pudiese interactuar con ellos, es decir, detectaba si lo que estabas escribiendo era una dirección de internet y te ofrecía abrirlo en el navegador.

Esta tecnología, aunque útil, quedo estancada hasta que reapareció Mac OS X Leopard en 2008, que volvió a incluirse profundamente en el sistema, permitiendo al usuario incluir una dirección en los contactos o una fecha en el calendario. Pero Apple no se detuvo en los sistemas de escritorio, sino que incluyó esta tecnología en iOS 3, para poder hacer lo mismo en los dispositivos móviles.

Actualmente, esta tecnología sigue creciendo a buen paso, llegando, en Mavericks, a integrarse con otros servicios de Apple, como el recién llegado Mapas. Por ejemplo, si en Mail recibimos un correo con una dirección, podemos abrir una pequeña pantalla de pop-up en la que nos aparezca esta dirección en un pequeño mapa, como podemos ver en la imagen. Además, podemos añadir esta dirección a nuestro contactos, como contacto nuevo o modificar alguno que ya tuviésemos incluido.

En Mavericks, este sistema está integrado en Mail, Contactos y Calendario, según informa Apple en su página oficial sobre el nuevo sistema. En iOS 7 ocurre algo parecido, pero un poco más avanzado. Si abrimos la aplicación Mapas y empezamos a poner una dirección, iOS detectará si lo que estamos escribiendo es una de las direcciones de nuestros contactos o la acabamos de recibir o leer en un mail, ofreciendo esta dirección como sugerencia antes de cualquier otra dirección.

Como vemos, Apple sigue trabajando para ofrecer una experiencia de usuario superior a la de la competencia, ofreciéndonos servicios y tecnologías que nos pueden facilitar mucho el trabajo. Con estas palabras no digo que sea mejor que el resto (aunque personal e interiormente sí lo crea) sino que se esfuerza y trabaja para intentar serlo. Somos cada uno de nosotros los que debemos decidir si trabajamos mejor con Apple o con cualquier otro sistema. ¿Te parece útil esta integración del sistema?