Durante una entrevista concedida a Bloomberg, Masayoshi Son, CEO de SoftBank –la tercera operadora más grande de Japón–, tuvo a bien explicar cómo consiguió el contrato de distribución en exclusiva del iPhone en 2008: dirigiéndose a Steve Jobs, por aquel entonces, el hombre en la cúspide de la pirámide de Apple.
Según Son, dos años antes del lanzamiento del icónico smartphone, consiguió reunirse con Jobs para tratar de mostrarle el boceto de un iPod con prestaciones móviles. Debido al avanzado estado del proyecto de desarrollo del iPhone, el CEO de Apple rehusó ver cualquier esbozo; sin embargo, parece ser que la charla derivó en una estrecha relación de cordialidad entre ambos.
Llevé mi pequeño dibujo de un iPod con funciones móviles. Se lo di, y Steve me dijo, “Masa, no me des tu dibujo. Ya tengo el mío”. Yo dije, “Vale, no necesito dártelo, pero en cuanto tengas tu propio producto, lo quiero para Japón”. Y el replicó, “Masa, estás loco”.
En aquella época, Son no era más que un joven emprendedor que había conseguido algunos millones vendiendo sus propias compañías de tecnología, por lo que carecía de relevancia alguna dentro del mundo de las tecnologías móviles. Así lo relataba el propio empresario y filántropo, considerado por Forbes como el segundo hombre más rico del país nipón:
Jobs me dijo, “Aún no hemos hablado con nadie, pero tú fuiste el primero que vino a verme. Te lo daré”.
Posteriormente, Son pidió a Jobs que reflejase por escrito que Apple le otorgaría la exclusividad de venta y distribución para el mercado japonés, pero se dio de bruces con la cruda realidad:
¿La respuesta de Jobs? “¡No! ¡Masa, no voy a firmar contigo porque ni siquiera eres dueño de una compañía de telefonía móvil!” Yo contesté, “Mira, Steve, me lo prometiste. Me diste tu palabra. Traeré una operadora a Japón”.
Dicho y hecho. SoftBank compró Vodafone Japan en marzo de 2006, lo que supuso la obtención de una participación de 78.000 millones de dólares en el mercado de telefonía móvil del país asiático. Y, por supuesto, en 2008 se firmó un acuerdo con Apple que le permitió convertirse en la única distribuidora oficial de iPhone en todo Japón.
