Era de esperar que llegarían pronto los primeros test de rendimiento del nuevo MacBook Air, que fue presentado ayer mismo. Como bien esperábamos, los cambios en este nuevo modelo se limitan a un precio 100 euros más ajustado que el de generación anterior, y al uso de la nueva gama de procesadores Intel Haswell, que como veremos, muestran un rendimiento muy levemente superior.
Esta vez tienen una frecuencia de reloj ligeramente superior, y pasan de los 1,3 GHz a los 1,4 GHz. Según el test de Geekbench, el procesador actual Core i5 4260U arroja 2532 puntos para el test mononúcleo y 4781 para el test multinúcleo. El MacBook Air del año pasado puntuó con 2461 y 4615 para los mismos test, respectivamente. Hablamos de una mínima diferencia de algo más de 100 puntos en el mejor de los casos, así que nada destacable.
Dicho esto, lo único que puede haberte fastidiado si compraste un MacBook Air hace poco es la bajada de precio de este nuevo modelo, ya que a nivel de rendimiento las diferencias serán inapreciables. Tanto es así que Apple ni siquiera ha cambiado la numeración de modelo de los nuevos MacBook Air 2014.
Y te preguntarás por qué tras un año el rendimiento ha mejorado tan poco, cuando siempre que Apple actualiza el procesador de sus equipos el salto es bastante mayor. La explicación es bastante simple: siguen siendo procesadores de la familia Haswell, que ya fue muy avanzada en su día, e Intel ha decidido no lanzar la siguiente evolución todavía —los Intel Broadwell, que no llegarán hasta 2015—, así que esto es lo mejor que podía hacer Apple por el momento.