El éxito del Apple Watch era algo que estaba cantado y que todos los analistas tecnológicos vaticinaban a raíz de la expectación que el reloj inteligente de Apple llevaba levantando meses atrás. Un ejemplo de esto ha sido la avalancha de órdenes de reserva que durante el día de ayer, 10 de abril, se dieron, hasta llegar al punto de que algunos de esos relojes no serán enviados hasta junio.
El caso es que ante la gran acogida que va a tener el Apple Watch, o mejor dicho, que ya está teniendo el mismo, la competencia está poniéndose las pilas ante el hecho de que Apple, después de hacerlo con el iPod, el iPhone y el iPad, ha vuelta a crear un dispositivo que incluso siendo el último del sector en salir al mercado, va directo a ocupar el lugar de dispositivo emblemático del género, y sin duda alguna, el de smartwatch más vendido.
La primera medida ante la salida al mercado del Apple Watch, o ante la posibilidad de reservarlo, ha sido la bajada de precios. El Moto 360, reloj de Motorola que es el estandarte de los relojes con Android Wear, ya tiene un precio en sitios como Amazon o BestBuy de 180 dólares, lo que vienen a ser unos 70 dólares menos que cuando salió al mercado, una cifra cuando menos significativa y que supone una rebaja global de un 28% en el precio.
Además de para ser competencia al Apple Watch, la bajada de preciosa del Moto 360 y de algún que otro reloj inteligente más, podría deberse a los rumores que dicen que pronto todos estos dispositivos serán compatibles con el iPhone, lo que abriría aún más las posibilidades para los mismos y para sus nuevas versiones, que se esperan algunas de las mismas en este 2015, aunque como decíamos, difícilmente podrán hacerle sombra al Apple Watch.
En conclusión, bajar los precios es una estrategia que puede claramente interpretarse como la conciencia de que hacerle competencia al Apple Watch es casi imposible si no es por medio de una diferencia de precios brutal que ponga la balanza a la hora de tomar una decisión de compra, muy en contra del Apple Watch. Se pueden bajar los precios, aunque eso no hace mejor en ningún caso mejor al reloj que tienes, solo lo hace más barato.