Con la puesta a la venta de los iPhone 6s y iPhone 6s Plus han empezado a aparecer los primeros teardowns y estos, además de confirmar datos que se daban por seguros como los 2GB de RAM o la disminución en la batería, nos traen características de sus entrañas. En este caso hoy toca hablar del procesador A9, esa bestia que mueve a los nuevos iPhone y que es fabricado por TSMC y por Samsung.
La noticia radica en algo de lo que ya se había hablado a lo largo de los últimos meses. Samsung fabrica el A9 con arquitectura de 14 nanómetros mientras que TSMC parece haber sido incapaz de alcanzar dicha cifra y se conforma con arquitectura de 16 nanómetros. Esto significa que dependiendo del iPhone que toque puedes tener un procesador diferente.
La idea que ha parecido cundir entre la comunidad es que los chips de mayor tamaño irían a parar al iPhone 6s Plus mientras que los más pequeños, fabricados por Samsung, serían para el iPhone 6s, idea que ha sido desmentida por el desarrollador Hiraku Wang que ha creado una aplicación que es capaz de determinar si un iPhone tiene un chip de TSMC o un chip de Samsung, y ha compartido algunos datos sobre los resultados obtenidos de los usuarios que han instalado su aplicación.
Según los resultados obtenidos en los aproximadamente 2.500 iPhones que han instalado su aplicación los chips de TSMC están presentes en el 58,96 por ciento de los dispositivos mientras que los de Samsung solo en el 41,04 por ciento. Al contrario de lo que se pensó el iPhone 6s Plus parece tener una relación equitativa de procesadores de Samsung y TSMC. Todo esto relativizándolo por el tamaño del muestreo.
Lo único que queda por saber es si los dos chips tienen un rendimiento idéntico o si existe alguna diferencia entre ellos. No debería ni tampoco sería admisible que, por problemas de tipo logístico y de producción, los usuarios tuvieran que verse abocados a la suerte a la hora de comprar un iPhone 6s o un iPhone 6s Plus.
