Durante los últimos años, Apple ha seguido una misma estrategia para las cámaras traseras de sus iPhone: la resolución no es lo único importante. Hemos visto como durante los dos cursos anteriores, fabricantes como Samsung, LG, HTC o Motorola han disparado el número de megapíxeles de sus cámaras hasta cifras tan escalofriantes como 16 o 20 megapíxeles.
Pero aquellas personas que hayan sentido algo de interés por conocer cómo funciona exactamente esto de la fotografía, de la luz captada por el sensor de la cámara y cómo es este el principal factor de diferenciación para una buena nitidez de imagen, sabrán que el número de resolución tan sumamente importante, o al menos no lo es cuando el sensor es tan pequeño que los objetos y escenas no se pueden afrontar con nitidez, como ocurre en muchos terminales que alardean de contar con una gran resolución pero cuyos resultados quedan en evidencia.
Apple ha querido primar otros factores como la ópticas o el procesado de imagen, anteponiendo éstos sobre el tamaño de las imágenes. Pero todo influye, el mercado de la tecnología se mueve y es necesario subir un peldaño, sobre todo cuando cámaras como las de los LG G4 o Samsung Galaxy S6, empiezan a distanciarse en cuanto a calidad del último iPhone 6.
iSight Camera, ahora con 12 megapíxeles
El número de megapíxeles aumenta ahora hasta los 12 megapíxeles, con un incremento total, según Apple, de un 50% más en cantidad de píxeles totales, es decir, que la cantidad de veces que podríamos ampliar la imagen sin perder nitidez es muy superior. Recordemos que el aumento en el número de megapíxeles no es sino una división mayor en la cantidad de “celdas”, pequeño cuadros que pueden ser rellenados con la luz de las escenas. Si estas pequeñas celdas reciben buena luz gracias al sensor y la óptica, el aumento de resolución puede notarse notablemente, sobre todo cuando ampliamos la imagen o cuando la visualizamos en un ordenador o televisor, de lo contrario, el aumento de calidad no tiene porque estar asegurado.
La apertura máxima de este sensor es f/2.2, que quizás podría haberse visto mejorado para captar aún más luz si fuera posible, ya que terminales como Samsung Galaxy S6 cuentan con un sensor de apertura máxma f/1.9, pero cuya importancia puede verse relativizada visto el buen hacer y gran optimización que Apple hace de sus cámaras. Además, el iPhone 6s Plus contará, al igual que el curso pasado, con estabilizador de imágen óptico, toda una ayuda de valor incalculable para la toma de fotografías, sobre todo cuando hacemos zoom, así como en la grabación de vídeo.
Y hablando de la grabación de vídeo, Apple por fin asciende a la “solicitada” cifra de grabación a 4K (30 fps), lo que nos permitirá aumentar el nivel de nitidez enormemente si el sensor consigue captar toda la luz necesaria. La grabación a 1080, Full HD, permitirá una tasa de frames por segundo de 60 fps, permitiéndonos resultados a cámara lenta impresionantes. Las muestras que nos enseñaron nos dejaron bastante impresionados, aunque nos cuesta creer en este tipo de resultados en eventos hasta que no lo hayamos podido comprobar en persona.
Para su cámara delantera, Face Time HD, Apple ha decidido incorporar un sensor de 5 megapíxeles, eso sí, ahora con un flash delantero, conocido como Retina Flash (¡qué original!) que nos permitirá contar con un apoyo importante de luz para capturas selfies con bajas condiciones lumínicas como en las situaciones nocturnas o en interiores.
