Cómo sabéis el programa de reciclaje de Apple lleva funcionando desde hace ya prácticamente dos años. Este programa consiste —para los que no estéis muy familiarizados— en la “re-compra” de tu antiguo dispositivo iPhone, iPad o Mac por una cantidad que ellos estimen oportuna.
Si es un iPhone, iPad u otro smartphone que ellos acepten, se te entregará una Tarjeta regalo de la Apple Store para que lo vuelvas a invertir en algún producto Apple. En el caso de que sea un Mac u otro ordenador de un fabricante diferente, se te hará un ingreso en tu cuenta bancaria.
Con esto, Apple intenta hacer todo lo posible para que sus productos no sean contaminantes potenciales. Porque como bien dicen ellos en su página oficial están comprometidos con el medio ambiente:
El compromiso de Apple con el medio ambiente incluye encontrar la manera más eficiente de reciclar o reutilizar los aparatos electrónicos al final de su vida útil, ya sean iPhone, iPad, ordenadores Mac o PC, smartphones o monitores de otros fabricantes. Hasta puede que recibas dinero por ellos.
Hoy quiero explicaros el procedimiento por el que se rigen para la realización del reciclaje de sus productos, ya que hasta ahora era todo una incógnita.
El proceso de reciclaje
El inicio del proceso comienza en tu Apple Store más cercana. Lo primero que tienes es eliminar los datos personales y la restauración de fábrica del dispositivo. Si no sabes como hacerlo los trabajadores de la tienda te ayudarán a realizar este paso.
El primer paso que realizan una vez estamos en la tienda es comprobar que los componentes están bien y qué defectos tiene el dispositivo. Una vez pasado este primer control, se te abonará lo que estimen oportuno dependiendo de los desperfectos y componentes de tu terminal.
El segundo paso es otro punto de control. Aquí es donde se determina si el dispositivo acaba directamente como reciclado o se le hacen los arreglos pertinentes para acabar en las tiendas de segunda mano.
Tras esto primeros pasos, los productos destinados al reciclaje son almacenados en contenedores de una capacidad de 800 kg y que una vez alcanzan su capacidad son enviados a cintas transportadoras. En estas cintas los dispositivos son destruidos y enviados a clasificar, separando los componentes que son reciclables de los que no lo son.
Una vez se seleccionan los componentes reciclables de nuevo son acumulados en contenedores de 800 kg, para posteriormente ser trasportados hasta otros centros donde se encargan de darles otra utilidad.
Gracias a empresas como Apple cada vez hay mas conciencia social en torno al medio ambiente, ya que la marca mas importante de dispositivos electrónicos es la mas exigente en cuanto a reciclado se refiere. Reciclan en torno al 85% del dispositivo mientras que otras grandes empresas no llegan al 70%.
Como dato relevante Apple recicló 40.000 toneladas en el año 2014, suficiente para construir 160 km de vías de ferrocarril con el acero de sus productos. Sin duda un dato realmente increible.