No es la primera vez que se entra en debate acerca de la utilización de los cargadores falsos. Es muy probable que en algún momento, alguien de nosotros haya utilizado este tipo de cargadores. Y es que comprar un nuevo cargador oficial de la marca puede resultar excesivamente caro, si lo comparamos con las inmensas alternativas que nos ofrecen las tiendas online o los más que clásicos establecimientos chinos de nuestro barrio.
Los precios de los cargadores “falsos” suelen costar muchísimo menos que los originales, por lo que esta ganga se convierte en una razón de peso para querer adquirir uno de estos , si el que nos venía con el dispositivo de Apple ya no funciona. La firma californiana ha querido intervenir en estos debates de una manera contundente.
Los cargadores de Apple: sinónimo de calidad y seguridad
Tal y como ha confirmado la compañía, utilizar este tipo de cargadores conlleva serios problemas en nuestros terminales de la manzana. En primer lugar, pueden ocasionar fallos en las baterías, como también en la seguridad física, puesto que en el peor de los casos puede desenlazar en una terrible explosión, como las que se han registrado mayoritariamente en el continente asiático.
Además, a este problema hay que añadirle el inconveniente de la reparación. En el caso de que la batería de nuestro dispositivo experimente problemas, con motivo de la utilización de estos cargadores, el seguro de Apple no cubrirá la reparación. Por lo que nos tocaría abonar el importe de la nueva batería. Componente hardware que por desgracia no suele resultar muy económico.
Como hemos podido comprobar, resulta a la larga mucho más rentable adquirir accesorios y cargadores oficiales de la firma, ya que con el paso del tiempo, las alternativas económicas no suelen acabar muy bien.
Aunque un cargador oficial, ronde los 40 euros, al fin de cuentas resulta muchísimo más seguro y barato que abonar la reparación de nuestro terminal. No obstante, en el peor de los casos nos podríamos llegar a evitar posibles quemaduras a causa de los desperfectos que se podrían producir en las baterías.