Hoy ha llegado WhatsApp Status a la mayoría de nuestros países. WhatsApp se ha subido al carro que en su día empezó Snapchat. Sin embargo, no ha sido ni de lejos la primera, y es que ya hace tiempo que Instagram se apresuró a copiar esta función con sus Instagram Stories. Facebook también ha querido apuntarse a esta moda y hace más bien poco añadía esta función a su aplicación.
Sin embargo, WhatsApp es una de las mayores aplicaciones –si no la mayor– de mensajería instantánea, por lo que probablemente los WhatsApp Status no tengan demasiado sentido, y es que esta es una función más lógica de ver en una red social y no una aplicación como esta.
WhatsApp Status NO. Por favor, NO.
WhatsApp Status podría haber triunfado, pero parece que no lo hará. ¿Por qué? Si contamos con que Snapchat e Instagram ya tienen está función bastante más consolidada, que en la competencia no tienes que dar tu número para ver y que vean tus Status y que a una gran parte de usuarios les ha sentado como una patada en cierta parte que les quiten sus antiguos estados radicalmente y sin dejarles conservarlos, mal futuro veo a WhatsApp Status.
Y es que lo que WhatsApp nos ha hecho es poco menos que una imposición. De la noche a la mañana nos ha arrebatado una función bastante usada –que ha servido durante años para decir indirectas o reproches velados a más de uno– a cambio de darnos otra que ya teníamos en otras vías y que sinceramente, resulta demasiado intrusiva. Todo esto sin que podamos negarnos, ya que los usuarios de iOS no podemos instalar ningún APK antiguo para, aun perdiendo funciones, evitar los puñeteros Status.
Actualización: Los desarrolladores de WhatsApp se acercan a la actitud dictatorial, y mucho. Ni instalando una actualización de hace un mes se pueden evitar recibir los Status, ¿es lógico? Nada más lejos de la realidad
Bienvenido, Imperio Status, pero tienes los días contados
Personalmente, estoy en contra de la moda que Snapchat está imponiendo, y, por tanto, no soporto ver como en WhatsApp ahora aparece una nueva pestaña de “Estados”. Habría podido aguantarlo si no estuviera presente de una forma tan invasiva, pudiendo a la mínima abrir la pestaña de una función que no me interesa lo más mínimo.
Estos días estoy acampado en Android, probando un HTC 10 –por favor, ponedle más batería, que luego dicen de los iPhone–. He probado a instalar un APK –la aplicación “en bruto” para los que no sepáis qué es– de hace un mes. Sin resultado. WhatsApp ha decidido que todos los usuarios nos tenemos que “tragar” los Status, los queramos o no. Si no tengo Snapchat ni Instagram es porque no quiero lo que me dan. ¿Ahora me obligas a tenerlo tú?
Esto no hace sino animar a que todos aquellos que no estamos de acuerdo con este cambio a huir. ¿Dónde? A Telegram, la mejor alternativa a WhatsApp –incluso mejor que esta misma–, y me lo estoy planteando, aunque quizás me sea difícil por la cantidad de contactos que no están en Telegram. Sin embargo, tiempo al tiempo. WhatsApp, has empezado a cavar tu propia tumba.
¿Qué te parecen los nuevos WhatsApp Status?
