La reciente actualización de 10.3.3 — presentada esta semana — se destaca por la mejoras de seguridad que ofrece a los dispositivos Apple. Específicamente, esta última versión de iOS corrige un bug denominado CVE-2017-9417 que permite entrar y extraer todos los datos de un aparato, usando WI-FI.
La actualización de esta versión definitiva de iOS 10.3.3 logra que los usuarios se mantengan al margen de este tipo de fallos, que ponen en riesgo su información personal.
Actualización de iOS 10.3.3 corrige bug que vulnera los datos de los usuarios
Exactamente, el bug CVE-2017-9417 permite ejecutar códigos de forma remota en nuestros dispositivos Apple y según la información que se ha podido conseguir desde distintas fuentes afecta a los chips WiFi de Broadcom, utilizados por varios marcas además de Apple. En los iPhone, estos chips se utilizan en los modelos iPhone 5 hasta el iPhone 7, y en los iPad de cuarta generación y posteriores, así como en el iPod Touch de sexta generación.
Ahora, gracias al parche introducido por los desarrolladores de la firma de la manzana, los usuarios pueden resolver el problema con una sencilla actualización. En este punto sabemos que hay usuarios que se resisten a las actualizaciones, que ralentizan los dispositivos, sin embargo, a la hora de sopesar la seguridad, no cabe duda de que se trata de la mejor opción.
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Este tipo de riesgos en la seguridad de los dispositivos Apple, a través de redes de WI-FI no es nueva. Ya en 2015 otros piratas informáticos incurrieron en prácticas similares que se ejecutaban en iOS 8 con redes de este tipo.
El lanzamiento de esta versión ha significado una grata sorpresa para los usuarios de iOS, ya que hasta la fecha, las actualizaciones del sistema operativo solo de disfrutaban en la versión beta de iOS 11, pautado para septiembre. Sin embargo, este tipo de versiones no son del gusto de los usuarios en general, sino de los verdaderos fanboys.
