En estas vacaciones es seguro que estáis haciendo muchas fotografías con vuestro iPhone o iPad. La posibilidad de tener una cámara, que si bien no es profesional, puede hacer unas tomas bonitas es un lujo que se antojaba impensable hace años. Por eso, y desde mi experiencia personal, voy a proporcionarte unos consejos que funcionan. Antes de nada, comentarte que no soy profesional de la fotografía, es más, mis conocimientos sobre este noble arte son muy limitados. No por ello dejo de estudiar cómo puedo superarme cuando veo algo que me llama la atención.
No busco, encuentro
La mayoría de veces, la cosa más insignificante llama a realizar una foto que puede resultar llamativa. Una silla en medio de la nada, o la puerta de una casa pueden dar pie a hacer algo singular.
Da vueltas
En determinadas ocasiones, el objeto o persona a fotografiar no me “está diciendo nada”. Por eso, me muevo por el espacio hasta encontrar el encuadre o luz adecuados. Ya sabes, todo depende del cristal con el que se miren las cosas.
La lente, impoluta
Es un consejo de cajón, pero la lente de la cámara de un móvil es la gran olvidada de esta historia. Es una pena descargar las fotografías y ver una mancha, como una nebulosa en el centro. Cuesta poco darle un repaso, aunque sea con el borde de la camiseta.
Embellécelas
Los filtros están para algo, bien utilizados dan un toque que a veces tienen cierto halo mágico. Prueba, déjate llevar por tu instinto aunque a veces no sepas lo que hagas. Lo que importa es que lo has conseguido, que tu fotografía transmite.
Copia
¿Por qué no fijarse en la gente que sí que sabe? Nadie nace enseñado y las buenas fotos son fruto de muchas años de trabajo, de mucho experimentar e ir probando, ya sabes: ensayo-error.
Cuéntanos qué haces para sacar fotos bonitas. Sigue atento porque este artículo tiene una continuación que publicaremos en breve.