Hace unos días Apple ganaba los derechos de patente sobre las antenas microslot, una tecnología que permite integrar antenas de telefonía móvil en las carcasas de los dispositivos sin ser prácticamente visibles para el ojo humano.
Debido a que cada vez los dispositivos de hardware son más finos, el espacio interno para ubicar los chips de silicio y las antenas, sensores… es cada vez más pequeño. Ahí es donde entran en juego estas nuevas antenas microslot.
Aunque la patente que Apple presentó el pasado martes en la oficina de patentes de Estados Unidos se refiere a la implementación de este tipo de antenas en ordenadores portátiles, estas antenas también se podrían ubicar en dispositivos portátiles como smartphones o tabletas. En estos últimos es en los que, según parece, Apple integrará estas antenas en sus próximas generaciones.
Actualmente Apple usa dos antenas de radio internas que intercambian su uso mediante múltiples bandas de frecuencia, como se puede ver en el iPhone 5. Con este nuevo tipo de antenas sólo se necesitaría una y ocuparía mucho menos espacio que las que se usan actualmente, un espacio que podría aprovecharse, por ejemplo, para aumentar el tamaño de las baterías, con el incremento de capacidad que ello conlleva.
Para hacernos una idea del espacio que podrían ocupar estas antenas, se estima que tendrían unas dimensiones en torno al milímetro. Tamaño, que según fuera avanzándose esta tecnología se vería reducido. Otro de los puntos fuertes, además del espacio físico que ocupan, es el hecho de que son antenas multibanda, lo que supone la reducción de otras antenas para cubrir otras bandas de frecuencia. Con una sola antena se podrían gestionar diferentes tecnologías (Wi-Fi, Bluetooth, etc.)
Estas antenas se compondrían de material dieléctrico que separaría cada una de las láminas de la antena, este material podría ser poliepóxido, plástico, aire o cualquier otra sustancia que evite la entrada de suciedad del exterior. Y podrían ser localizadas prácticamente en cualquier lugar del dispositivo debido a sus pequeñas dimensiones.
Esperamos que Apple ponga en práctica esta tecnología en sus próximos dispositivos, ya que podría suponer mejoras no sólo en cuanto a la conectividad y a las dimensiones de nuestros dispositivos, sino en aspectos como la duración de nuestra batería.
