Apple consiguió su máximo histórico en la bolsa allá por septiembre, con un valor de más de 700 dólares por acción. Desde aquel pico no han dejado de caer sin parar. Las expectativas puestas sobre la empresa de la manzana mordida fueron demasiado altas y productos como el iPhone 5 o el iPad mini no consiguieron satisfacerlas.
El récord histórico de beneficios que Apple anunció en enero no fue suficiente, realmente fue considerado como un fracaso para los accionistas, porque esperaban mucho más. Tal es así que la compañía bajó 50 dólares en bolsa al día siguiente, por lo que ostentaron otro récord histórico, pero esta vez por ser el día que más dinero bajó en bolsa la compañía californiana.
Ahora que han vuelto a superar la barrera de los 400.000 millones en capital bursátil, los cuales hace poco pasaban la barrera por debajo, ha hecho que muchos analistas se vuelvan a interesar por la compañía, y poner de manifiesto una clara comparativa entre sus mayores rivales, como son Google y Samsung, los cuales han subido como la espuma desde el declive de los chicos de Cupertino.
Google sigue en su ascensión astronómica sin parar, consiguiendo su valor máximo en 831 dólares hace unos días. Samsung por su parte, se colocó encima de Apple, pero no les sobrepasa en exceso. Y es curioso como con el caos que montó Google con la falta de stock del Nexus 4 sus acciones siguieran subiendo como la espuma. En Apple sin embargo, cuando se anuncia cualquier tipo de noticia negativa, los batacazos son brutales.
Pero como decíamos, en Samsung acaban de presentar el nuevo Galaxy S 4, y el viernes pasado las tornas comenzaron a invertirse, pues las acciones de Apple subieron un 3% y las de los coreanos junto con los de Mountain View bajaron un 2%. Esto podría no significar nada, o un indicador de que el S 4 no ha gustado a nadie por ser más de lo mismo, más cuando en mercados como el europeo nos va a llegar un modelo capado con un procesador de segunda.
El Galaxy S 4 viene a ser lo mismo que el iPhone 5. Un teléfono que mejora lo que ya había pero que no trae nada nuevo. Una cita de Jay Yarow en Business Insider unas semanas previas al lanzamiento del smartphone de Samsung lo ponían de manifiesto:
Aprendiendo de nuestra experiencia, el lanzamiento del Galaxy S 4 podría ser similar al del iPhone 5. En otras palabras, cuando las acciones de Samsung se hundan. El S 4 podría tener un mejor procesador (Exynos Octa) y una pantalla más grande, ¿pero en qué más puede mejorar?
Android sigue en su ascenso imparable, mientras que Apple necesita volver a ser la de antes, por su propio camino, sin mirar ni depender de nadie, como en los viejos tiempos. Aunque siguen mejorando sus ventas y ganancias trimestre tras trimestre, tenemos en el tintero dos dispositivos dispuestos a reventar el mercado de nuevo como ya hicieron en su día el iPhone y el iPad, y no son otros que el iWatch y el iTV. ¿Los veremos en 2013? Puede.
De momento lo que tenemos asegurado es un nuevo iPhone 5S o 6, que vendrá a mejorar lo que ya tenemos, sin cambios en su espectacular pantalla Retina, pero que seguramente traiga el nuevo Apple A7, una mejor batería o una cámara muy mejorada respecto a lo que estábamos acostumbrados.
Yo creo que Apple ya esta condenado, el Galaxy s4 es un punto de inflexión. La tranquilidad es que sigue vendiendo bien, aunque no crece, y parece ya paso lo peor, así que dudo que las accciones bajen mucho mas, al menos a corto plazo. Por otro lado Google y Samsung siguen creciendo y acaparando cuota de mercado. Ahora mismo Apple no puede competir con ellos, debe preocuparse mas por un eventual crecimiento de Nokia o de Blackberry, que no están del todo muertas.