En público, todos los rivales de Apple siempre han tratado de menospreciar a la compañía de Cupertino, sobre todo cuando sacan un nuevo terminal. Sin embargo, a pesar de las numerosas críticas, todos saben que el Apple A7 ha sido la marca de un nuevo camino a seguir en la introducción de procesadores móviles.
En realidad los 64 bits del Apple han provocado el pánico en la competencia. Y Qualcomm, que es proveedor de muchos fabricantes de teléfonos Android, han intentado demostrar públicamente que no les importaba, pero se ha filtrado que internamente se asustaron bastante.
Los 64 bits del chip de Apple nos sentó como una patada en el estómago. Pero no solo a nosotros, sino a todo el mundo en realidad. Nos quedamos boquiabiertos, asombrados y no estábamos preparados. No es un gran salto de rendimiento ahora mismo, porque la mayoría del software no le sacará beneficio. Pero en términos generales es como 32 más, y ahora todo el mundo los quiere.
Recordemos que los procesadores de 64 bits pueden gestionar órdenes el doble de grandes que los de 32 bits, por lo que los grandes trabajos los pueden hacer de manera más rápida. Los ordenadores hace años que son de 64 bits, pero hasta que Apple lo puso en el iPhone 5s, nadie lo había puesto nunca antes en un smartphone.
Aunque Qualcomm decía que esto de los 64 bits solo era una técnica de marketing, lo cierto es que están trabajando en procesadores basados en esta tecnología, pero ya llevan un año de retraso porque hasta la siguiente generación no llegarán. Lo bueno de Apple es que solo tienen que diseñar un chip al año; Qualcomm tiene que crear múltiples diseños con pequeñas modificaciones para cumplir los estándares de cada fabricante.