iBeacon fue la respuesta de Apple al NFC por el que tanto han apostado otras marcas, sin que todavía haya tenido un despegue excesivo. Explicado así por encima, hace unos meses mi compañero Julio lo explicó en detalle, los iBeacons son pequeños sensores que cuentan con capacidad de transmisión de BLE, (Bluetooth Low Energy), y que tienen la capacidad de intercambiar información con dispositivos sin que intervenga en usuario, en función de unos perfiles previamente determinados.
Aunque los iBeacon ya son usados en las Apple Store parece que Apple está decidida a darle un empujón a su uso a través de su programa MFi ( Made For iPhone). El término iBeacon es utilizado a menudo para describir cualquier sensor bluetooth pero parece que Apple está empezando a realizar un control más estricto de quien utiliza la marca.
De la misma forma que para definir un producto como MFi se necesita cumplir una serie de requisitos, Apple está requiriendo a los fabricantes cumplir con ciertas especificaciones antes de usar el término iBeacon en sus productos, cambio que ha sido visto por primera vez recientemente.
¿Qué significa esta cambio? Los fabricantes tendrán ahora que solicitar a través del programa MFi el permiso para usar el nombre iBeacon sobre sus productos y en el proceso tendrán que cumplir con ciertas especificaciones. Un aspecto positivo es que no parece haber ninguna requisito que limite la funcionalidad de los productos que ya están en el mercado con la etiqueta de iBeacon.
Los requisitos que Apple ha puesto son comparables a los de los fabricantes de accesorios Bluetooth dentro del marco del programa de MFi. Esto lo único que vendrá a hacer es unificar las características de los dispositivos que lleven la marca iBeacon, ayudando así a su diferenciación del resto de competidores y también a una mejor integración con los dispositivos de Apple.
Entre los requisitos hay uno cuanto menos digno de mención y es que Apple no impide que los iBeacon trabajen con dispositivos Android. Esperemos que las restricciones no supongan un problema para los fabricantes, como puede pasar en otros dispositivos, que se lo digan si no a los fabricantes de controladores para iOS.
