Como hemos informado en las últimas semanas, Apple Pay está expandiéndose a un ritmo vertiginoso en Estados Unidos, de la mano de las primeras cadenas de tiendas que aceptaron el sistema de pagos móviles de Apple como forma de poder pagar los productos que se adquirieran en sus tiendas. Mientras Apple Pay crece, fenómenos de otros sistemas de pagos con más aceptación por ahora entre el público, como las tarjetas de crédito, van apareciendo, y tratándose de un tema tan sensible como el financiero, no podían faltar las cuestiones relativas a la propia seguridad del método de pago.
Las medidas que Apple ha tomado para proteger su sistema de pagos, como por ejemplo, no transmitir el número de tarjeta bancario, sino otro número identificativo, ponen a buen recaudo la información bancaria de los usuarios, de manera que para los criminales es altamente complicado poder atacar a Apple Pay. El caso es que en el sistema sí que existe un eslabón débil que provoca el robo de información bancaria de los clientes, y este eslabón parecen ser precisamente, las propias entidades bancarias.
Para poder usar Apple Pay, la intervención de las entidades bancarias es necesaria con el objetivo de verificar y aprobar la solicitud del usuario. Es ahí, donde los bancos han sido sorprendidos en Estados Unidos, por los fraudes que se estaban produciendo, que básicamente, consistían en criminales que compraban productos de alto valor en las tiendas de Apple gracias a agujeros de seguridad que existían precisamente en esos procesos de verificación y aprobación.
Al final y a pesar de las cautelas que Apple ha puesto en que su sistema sea totalmente seguro, parece que depender de los bancos le causará problemas, aunque las entidades bancarias parece que ya están poniendo de su parte y pretenden mejorar estos procesos de verificación y aprobación mediante mensajes de texto, envíos de correos electrónicos e incluso llamadas antes de autorizar, con el objetivo de que ninguno de los dos millones de usuarios de Apple Pay que ya existen en Estados Unidos puedan verse afectados por este tipo de robo de datos y estafa económica.
En conclusión, los mismos trucos de ingeniería social siguen haciendo estragos a las entidades bancarias, que parecen incapaces de poder luchar contra el fraude y el robo de identidad y que se encuentran bastante rezagadas en cuestiones de seguridad con respecto a compañías como Apple. El sistema de pagos móviles Apple Pay, tiene visos de triunfar y seguir expandiéndose a más países, aunque es necesario que Apple exija a los bancos un mayor cuidado en cuanto a sus sistemas de seguridad, para que los fallos que estos están originando, no acaben afectando al propio Apple Pay como método de pago.
Que idiota es usted oiga, el problema no es de los bancos es del sistema de Apple, infórmese bien de fuentes fiables no de otros fanáticos cómo su merce
Más tonto y naces muerto.
Tu comprensión lectora es digna de estudio.
No tenes idea de lo que digo pendejo, igual de estúpido que todos los borregos de Apple
Para que se esfuerzan apple nunca es culpable de nada, recuerdan la mala construcción de los iPhone, donde los dedos tapaban la señal de la antena, apple se deslindó de responsabilidades y dijo que el problema era de los usuarios,no me sorprende que ahora haga esto, solo que sin ser comunicado de apole, si no de los fans, a los cuales a adiestrado como barreras humanas ante criticas fuertes como esta. Pero no se dan cuenta que lo usuarios de apple son los únicos afectados al confiar en una empresa que sus precios son altos y su calidad, seguridad y productos son mediocres.
[…] El punto supuestamente débil del sistema, no es el propio sistema ni depende de Apple, sino de nuestro banco. Es el banco el que puede poner el verdadero impedimento a una acción fraudulenta en el uso del […]