Normalmente cuando Apple lanza una actualización de alguno de sus Mac, se limitan a actualizar sus especificaciones, sin hacer cambios físicos hasta que se releva a una nueva generación, cada varios años. En los refrescos se procede a mejorar el procesador, la memoria RAM, la capacidad del disco duro, o simplemente a mejorar el precio.
En algunos casos como el de los últimos MacBook Pro, se ha incorporado el nuevo trackpad Force Touch, aprovechando también la salida en el nuevo MacBook de 12 pulgadas con pantalla Retina.
Pues bien, en el próximo refresco del iMac, Apple tiene pensado montar una pantalla de mayor calidad, más allá de una gama de procesadores mejorados. Esta nueva pantalla contaría con una saturación de color mejorada gracias al uso de un nuevo material llamado KSF en el fósforo de los LED, aunque aún seguimos sin espera la pantalla Retina en el modelo más pequeño de 21,5 pulgadas.
Estos nuevos iMac (late 2015) llegarán a final de año, en el tercer cuatrimestre de 2015. El iMac 5K fue lanzado en octubre de 2014, mientras que el resto de la familia iMac permanece inalterada desde septiembre de 2013, ya que Intel lleva desde entonces sin sacar procesadores mejorados de la familia que usa el iMac, que no llegan a ser procesadores de sobremesa al uso.
Una vez más, en Cupertino se saltan los Broadwell, para dar el salto a lo grande con la nueva generación Skylake a la vuelta de la esquina. Así que gracias a ello, parece ser que Apple actualizará toda la familia por la puerta grande, convirtiéndose además en uno de los primeros fabricantes en montar los nuevos procesadores de Intel en sus ordenadores.
Apple se está quitando todo el stock posible de los iMac actuales con la promoción de Vuelta al cole que tienen en Estados Unidos, por lo que en no mucho tiempo podríamos ver retrasos en las entregas, preparándonos entonces para recibir a los nuevos all-in-one de Apple.