Uno de los problemas que tuvieron los nuevos iMac es que Apple no fue capaz de cubrir la demanda. Si a esto le sumamos que eliminaron de las tiendas los modelos antiguos, veremos que las ventas en navidades no fueron todo lo buenas que a los de Cupertino les hubiera gustado.
Por fin, después de cuatro meses tras su presentación, los envíos se estabilizan y muestran tiempos de envío razonables. En países como Estados Unidos y Canadá los tiempos de envío se han reducido a 1-3 días en todos los modelos. En España también han mejorado las cosas, mostrando envío de 1-2 semanas en el modelo de 21,5 pulgadas y 5-7 días en el modelo de 27 pulgadas, que tiene menos demanda.
Los envíos han mejorado lo suficiente como para que distribuidores oficiales de Apple comiencen a tener existencias, como veíamos en el Facebook de Benotac esta misma tarde.
Los primeros indicios de las mejoras de stock las vimos en enero. Recordemos que los nuevos iMac comenzaron a enviarse en diciembre con cuentagotas, y supusieron una reducción de las ventas de Mac en un 17% en el último cuarto.
Estos problemas se traducían en un proceso de ensamblaje complejo, que tenía que ver con el proceso del laminado de la pantalla en el diseño. Ahora que las fechas de envío de los iMac son normales, Apple está preparada para darle un lavado de cara a la Thunderbolt Display, que pide a gritos ser renovada, sobre todo con el desorbitado precio que piden por ella.
Será ahora cuando las ventas de Mac vuelvan a dispararse, y los iMac estén a completa disposición de todos aquellos que quieran comprar el todo en uno más popular del momento.
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