Las baterías son sin lugar a duda el cuello de botella de los dispositivos móviles, y es, dejando a un lado guerras de megapíxeles, resoluciones de pantalla o núcleos del procesador, la auténtica demanda de los usuarios.
Normalmente los fabricantes tienden a aumentar las capacidades de las baterías como medio para conseguir elevar las autonomías de sus dispositivos, sin embargo, y muchos empiezan a hacerlo, la optimización es un campo al que se le saca poco partido y que puede mejorar la duración de la batería tanto o incluso más que el aumento de su capacidad.
Apple, parece que quiere centrarse en este aspecto, el de la optimización, según las dos últimas patentes publicadas hoy por la Oficina de Marcas y Patentes de EEUU, en las que Apple muestra cómo utilizaría la información obtenida con los patrones de uso de nuestros dispositivos iOS para ajustar el rendimiento y así prolongar la duración de la batería.
Por ejemplo, si mediante tus patrones de uso, el iPhone detecta que los jueves sueles quedarte sin batería, se tomaría como base el comportamiento y el uso durante ese día para configurar el sistema de gestión de energía y evitar así en la medida de lo posible que te quedases sin batería.
Esto podría significar la búsqueda de patrones en el comportamiento de un usuario para así encontrar cuando es menos probable que utilice su iPhone, por ejemplo, cuando lo pone en modo avión, y así reducir el rendimiento durante estos periodos, a sabiendas de que el usuario es menos probable que utilice el dispositivo en ese momento. Por el contrario, el iPhone también podría aprender a interpretar nuestra jornada laboral y así deducir que periodos del día es más utilizado, y así conservar batería para esos momentos.
Las patentes también describen cómo los dispositivos iOS pueden diferenciar entre una carga necesaria y una carga por precaución por llamarlo de alguna manera. Si se realizan cargas con regularidad, y estas son sustancialmente menores a la capacidad de la batería Apple puede detectarlo y pensar que estas cargas son debidas a la idoneidad del momento, por ejemplo mientras trabajas en tu escritorio, y no porque el iPhone esté a punto de quedarse sin batería.
Si la carga que se utiliza en un día supera regularmente la capacidad de la batería, sin embargo, Apple puede volver a configurar el sistema de gestión de energía del iPhone sin que el usuario sea consciente de ello para estirar la capacidad de la batería y evitar la necesidad de cargar a mitad del día
A pesar de que han salido hoy a la luz, como viene siendo habitual, estas patentes fueron ambas presentadas el 20 de septiembre de 2012, por lo que, viendo el tiempo que ha pasado desde entonces, no me extrañaría que pudiésemos ver algo relacionado con esto en próximas versiones de iOS, ¿en iOS 8 quizá?
Mayor tonteria de apple vaya tela