¿Es la imparable expansión de Xiaomi una amenaza al dominio del mercado de Apple?

Desde un tiempo a esta parte han venido surgiendo en China diversas marcas de telefonía móvil que están copando el mercado en algunas regiones asiáticas y que son la muestra de que en el gigante asiático, además de producir a bajo coste para empresas de países de Europa, Estados Unidos, e incluso otras partes de Asia, se está gestando lo que podría ser un importante vivero de empresas tecnológicas cuyos productos podrían pronto dar el salto fuera de las fronteras chinas.

En este marco de gestación de nuevos empresas tecnológicas, hay una que destaca en especial por encima del resto por su fulgurante ascenso en cuota de mercado y expansión en toda China, además de por la creciente demanda de sus dispositivos fuera de sus fronteras donde la empresa no los comercializa aún en muchos sitios de manera oficial. Esta empresa es sin duda, Xiaomi.

En el último año hemos asistido a la llegada por parte de Xiaomi de importantes dispositivos móviles como el Xiaomi Mi4, un tope de gama que no tiene nada que envidiar a ninguna de cualquier otra marca, así como a una tablet, la Xiaomi MiPad, que se asemejaba al iPad mini y que venía a ocupar su nicho de mercado. Tanto de estos dos dispositivos como del resto de su gama, Xiaomi ha vendido millones de los mismos, dado sobre todo, sus buenas prestaciones y sus increíbles precios, muy por debajo de lo que estamos acostumbrados a ver en dispositivos de semejante calidad en otras marcas. Todo lo anterior es ya de sobra conocido, así como el fichaje de Hugo Barra, un peso pesado de Google al que fichó la compañía china con la vista puesta en su expansión por el mundo.

Hoy sin embargo, la noticia no es el gran número de ventas o las virtudes de sus dispositivos, sino el valor que ya tiene la compañía, que son nada más y nada menos que 36.900 millones de euros, cifra que casi triplica la capitalización bursátil de Lenovo, otra de las punteras empresas tecnológicas chinas. Y todo esto en el marco del que podría ser según ciertos rumores, el nuevo equipo de Xiaomi, un portátil que vendría a atacar el mercado del MacBook Air de Apple y que curiosamente en las primeras imágenes que se han filtrado, tendría un aspecto muy similar al mismo.

¿Existen por tanto razones fundadas para que Apple tema por la expansión de Xiaomi? Si de mi opinión se tratara diría que no. Las razones son básicamente que Xiaomi se encuentra muy lejos aún de los 700.000 millones de dólares que Apple valen en bolsa, del prestigio de la marca de la manzana mordida a nivel mundial y de fabricar dispositivos que significan una verdadera innovación en el sector de la electrónica de consumo, algo que Apple si hace.

¿Quién debe temer por tanto esta expansión de Xiaomi? Claramente, diría que Samsung. Aunque Samsung se encuentra lejos también en valor en bolsa por ejemplo, las distancias no son tan insalvables. En primer lugar porque ambas tienen un punto en común, el uso de Android como sistema operativo en sus dispositivos. En segundo lugar, los precios de Samsung son muy superiores a los de Xiaomi en general, algo que podría perjudicar a la surcoreana, y en tercer lugar, porque Samsung se vería luchando en dos frentes, contra Apple en vanguardia por el mercado mundial y por la retaguardia con Xiaomi, por el liderazgo del propia mercado de dispositivos Android, algo que sería bastante difícil de aguantar.

Xiaomi da la sensación cada día más, de que se puede convertir en una especie de Apple dentro de los dispositivos Android, debido a la capa de personalización de sus dispositivos, la calidad de los mismos y la cantidad de seguidores que están captando, aumentando cada vez más la expectación que levanta la compañía con la presentación de sus nuevos productos y generándose una especie de fenómeno “fan” con respecto a la propia empresa, algo que ocurre en cierta manera con Apple.

¿Crees que el gran perjudicado por el crecimiento de Xiaomi es Apple, o por el contrario consideras que el verdadero damnificado es Samsung? Puedes dejarnos un comentario abajo exponiendo tu opinión y las razones que te llevan a pensar de una manera o de otra.