Últimamente no paramos de oír testimonios de gente afectada por la explosión o el sobrecalentamiento de su teléfono. Un claro ejemplo es el más que polémico Note 7, retirado del mercado por ello. Sin embargo, estos casos también se están dando en nuestros queridos iPhone, principalmente el iPhone 6 Plus, del que explotaron dos unidades la semana pasada. Por todo ello, hoy os traemos unos cuantos consejos para no correr riesgos.
¿Por qué puede explotar mi iPhone?
Hay varios factores que pueden llegar a causar la explosión de nuestro terminal. La primera es la tecnología de carga rápida que implementan los últimos dispositivos. Para ello se incrementa la corriente que llega a nuestro móvil, con lo que aumenta la temperatura de la batería durante la carga, más incluso si hacemos un uso intensivo de este mientras se carga.
Otra causa puede ser los golpes o caídas, que pueden ocasionar micropunciones en la membrana que separa los dos extremos de la batería –ánodo y cátodo– provocando un cortocircuito y una más que posible explosión.
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El más importante pero menos conocido es la llamada “fuga térmica”, que sucede cuando se concentra calor en una zona concreta y no consigue enfriarse lo suficientemente rápido, por lo que da lugar a una reacción en cadena que genera más y más calor hasta que la situación resulta insostenible y el terminal explota.
Cómo evitar que explote tu iPhone
Puede parecer publicidad, pero en verdad no hay nada más fiable que un cargador de la propia marca. Si nos arriesgamos con marcas chinas o desconocidas, puede que no traigan los elementos de seguridad necesarios y, aunque no explote, la batería de nuestro iPhone sufrirá.
Deja de cargar tu móvil si se calienta. No importa si tienes una reunión importantísima en meda hora y necesitas carga desesperadamente, es mejor conservar el terminal de una pieza.
Cuidado con dónde cargas tu móvil. Si enchufas tu terminal y lo dejas a plena luz del sol, probablemente se asemejará a una tostadora la próxima vez que lo toques –y más al tener diseño metálico–. Por tanto, lo mejor es dejar el móvil cargando a la sombra de algún mueble o en un lugar fresco.
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Con todos estos consejos esperamos que no tengas que experimentar ninguno de estos problemas, aunque recuerda que un poco de precaución puede mantener con vida a tu iPhone.
¿Alguna vez has tenido que dejar de usar tu terminal por culpa del sobrecalentamiento?
