El nuevo Mac Pro, casi la mitad de caro que si nos montáramos un PC equivalente

Suelen decir que los Mac son muy caros, y que es muy fácil montarnos un PC el doble de rápido por la mitad de precio, si somos capaces de prescindir del diseño. Esto se puede interpretar de muchas maneras, pero en según que casos puede ser cierto. Sin embargo, con el nuevo Mac Pro las cosas no son así; utiliza componentes de primer nivel y no es un equipo nada caro para lo que ofrece.

No es un PC para jugar, no es una torre vitaminada. Es una estación de trabajo con componentes de servidor que valen miles de dólares por separado, y Apple los empaqueta en un pequeño cilindro y los vende por 3000 euros. Sí, es muy barato, y ahora veremos por qué.

Si eligiéramos montarnos un PC con una configuración lo más parecida posible a un Mac Pro tope de gama (que cuesta 9649 euros), tendríamos que hacer frente a comprar un Intel Xeon E5 de 12 núcleos, 64 GB de RAM, dos AMD FirePro D700 con 6GB de memoria GDDR5 y un disco SSD de 1 TB por PCI-e.

Este PC nos obligaría también a comprar una caja de gama alta para alojar la enorme placa base y una fuente de alimentación que esté a la altura. Al final tendremos una torre enorme con equipamiento valorado en 14.000€ –sólo las gráficas equiparan 7000 euros, la mitad del presupuesto–, mientras que Apple nos da un pequeño cilindro que vale una tercera parte. La papelera tonta ya no parece tan cara, ¿eh?

En Apple Insider hacen un despiece detallado de todos los materiales comprados, y no vale comprar componentes más baratos con números de capacidad similares. El Mac Pro usa tecnología de alto nivel, y la tecnología de alto nivel en PC también es muy cara.

Y claro, a estos precios del PC no se le han sumado los costes de envío, el tiempo que necesitaríamos para ensamblar el equipo y las distintas complicaciones que nos podrían surgir hasta que el equipo queda 100% operativo. Apple nos da un equipo que funciona nada más sacarlo de la caja, con un diseño majestuoso y unos materiales y componentes con la última tecnología, y casi por la mitad de precio.

Pero claro, el Mac Pro no es todo ventajas, es un equipo bastante ampliable, pero al perder la forma de torre muchas ampliaciones se pierden, ya que todo recae sobre los puertos Thunderbolt. Esto puede convertir nuestro escritorio en un caos de cables e incrementar el precio si empezamos a comprar carcasas de discos duros Thunderbolt. Según a qué profesionales no les saldrá rentable la opción de Apple y preferirán montarse su propio PC a medida, incluso un Hackintosh.

Lo que no sabemos es cuanto cuestan los componentes a Apple, y si realmente ganan mucho dinero por cada Mac Pro que venden, pues recordemos que se fabrican en Estados Unidos y eso aumenta muchísimo los precios de producción. Como vemos, las piezas de cara al consumidor son muy caras, y además el Mac Pro utiliza procesos de ensamblaje muy específicos que a corto plazo le pueden estar costando mucho dinero a Apple, y que no serán rentables hasta pasado un tiempo.